Faltan catorce partidos para que el curso futbolístico 2014-2015 baje el telón, un tercio de la liga, 42 puntos en juego todavía, de los que el Deportivo necesita sumar poco más de un tercio para asegurarse la permanencia en Primera División. Con 15 o 16 más los blanquiazules podrán certificar su continuidad en la elite según los cálculos más optimistas y tal como se va desarrollando la competición. Una cifra al alcance de los coruñeses, a pesar de que en Riazor parece que se ha instalado el pesimismo, el miedo, tras la derrota frente al Celta en el clásico gallego. Fabricio Agosto, el portero blanquiazul, destierra ese término del vocabulario del vestuario. "Si tenemos miedo, nos vamos a Segunda del tirón", declaró el meta canario ayer en rueda de prensa.

El Deportivo está a dos puntos de los puestos de descenso tras perder dos partidos consecutivos -Madrid y Celta-, en los que cedió parte del colchón que había acumulado en las tres primeras jornadas de la segunda vuelta. Un empate y dos victorias que le permitieron marcar una distancia de cinco puntos con respecto a la zona de peligro. Sin embargo, los blanquiazules dependen de sí mismos para alcanzar el objetivo. En los catorce partidos que faltan tendrán siete enfrentamientos directos, es decir, contra equipos que están en una situación similar. Hasta once estarían en estos momentos involucrados en la lucha por la permanencia. Entre el decimoctavo, el Levante, y el décimo, Real Sociedad, hay cinco puntos de diferencia. En medio están los deportivistas, con cinco rivales por encima y otros tantos por abajo.

De estos, cuatro todavía esperan a los jugadores de Víctor Fernández, el primero el Almería -sábado día 28, 20.00 horas-, "una final", según Fabricio. "Los puntos de este partido tienen una importancia vital", recordó el canario; también viajarán los blanquiazules a Elche -jornada 34-; mientras que recibirán en Riazor al Córdoba -jornada 30- y Levante -penúltimo partido- con los que empató en la primera vuelta. Del otro grupo, de los que están con ventaja en la clasificación, tres recibirán a los coruñeses en sus respectivos campos -Getafe, Real Sociedad y Athletic-.

Si el Deportivo tiene siete encuentros directos, los rivales que están por detrás en la clasificación cuentan con un calendario muy similar y con un número idéntico de enfrentamientos directos, partido arriba, partido abajo, y con los mismos adversarios prácticamente. Lo lógico toda vez que se ha disputado un quinto de la segunda vuelta, una ronda que los deportivistas iniciaron de mejor forma que el arranque del campeonato. Ahora llevan siete puntos en cinco partidos. En el comienzo del curso hicieron cuatro en el mismo número de jornadas y ante los mismos adversarios. Tres puntos más que los sacaron del pozo. "Otros equipos firmarían estar donde estamos nosotros", recordó Fabricio.

La llave para alcanzar el éxito es muy fácil para el portero canario: "Tenemos que seguir siendo una piña y estar lo más acertados posible". No hay mayor secreto para él, que es uno de los futbolistas más importantes del Deportivo a lo largo de la temporada. Sabe que el equipo necesita ser más eficaz para sumar, y en estos choques directos hay dos facetas que pueden decidir, por un lado están los tres puntos por la victoria y por el otro los que se le impide sumar al rival. Además, el Deportivo tiene que estar vigilante con el golaverage particular, algo que ya había advertido Álex hace unas semanas. "Puede ser muy importante", había dicho el de la Sagrada Familia. Ahora solo queda competir sin "miedo a nada".