Cuestión de puntería

Casi todas las semanas, el entrenador deportivista, Víctor Fernández, centra alguna de las sesiones del equipo en el disparo a portería y la finalización de las jugadas. Ésta no ha sido la excepción. El técnico ha vuelto a insistir en las transiciones y el remate en el área durante los días previos a la trascendental visita mañana del Espanyol a Riazor (12.00 horas) para terminar de corregir una de las principales debilidades del equipo desde que arrancara el campeonato.

Que al equipo le faltara gol desde el comienzo de la temporada venía derivado de sus problemas para fabricar ocasiones. Más recientemente, sin embargo, la pobre capacidad anotadora del equipo es consecuencia de su poco acierto rematador.

Trabajo específico para mejorar las acciones a balón parado

Los deportivistas han conseguido incrementar el número de ocasiones por partido y su ataque ganó en fluidez desde el comienzo del año. La cifra de goles, no obstante, se ha mantenido estancada entre las más bajas de la categoría.

El equipo de Víctor Fernández suma a estas alturas 23 goles. Solo Almería, Córdoba y Granada -otros tres de los equipos implicados en la lucha por la permanencia- presentan peores registros. Los números de los deportivistas en cuanto a remates a portería, sin embargo, están ligeramente por encima de ese grupo de equipos.

El Deportivo no marca, pero dispara a puerta relativamente bastante para la posición que ocupa en la clasificación. Lo suyo es cuestión de puntería. Hay incluso equipos varios puestos por encima en la tabla que acumulan menos remates.

Los blanquiazules suman a estas alturas un total de 285 disparos a favor. Son algo más de diez por partido. Está lejos de los 18 que promedia el Madrid, pero por encima de los que consiguen Almería, Levante, Athletic, Córdoba, Eibar, Granada y Espanyol.

El conjunto que dirige el exdeportivista Sergio González rentabiliza mucho mejor sus ocasiones. Suma 32 goles y su trío de delanteros (Sergio García, Stuani y Caicedo) acumula más tantos que todo el Deportivo.

Los problemas del Deportivo de cara a gol se han manifestado especialmente en las últimas jornadas, coincidiendo con el decaimiento en los resultados y la pérdida de posiciones en la clasificación. Ante Madrid, Celta, Almería y Valencia los blanquiazules se quedaron con el marcador a cero. Contra el Sevilla consiguieron anotar tres goles, pero no sirvieron para evitar la derrota.

Todo ello ha coincidido además con la sequía goleadora de un Oriol Riera que el jueves se reivindicaba y pedía más tranquilidad para el equipo. Ante el Espanyol, sin embargo, el Deportivo afrontará otra prueba relacionada con su capacidad anotadora.

Está por ver si el equipo de Víctor Fernández mantiene su producción ofensiva en un compromiso como el que afrontará mañana en Riazor. Ante el Valencia hace una semana ya matizó ese atrevimiento que se pudo ver contra el Sevilla, por ejemplo.

Encontrar un equilibrio en el juego del equipo preocupa tanto a Víctor Fernández como que se comiencen a rentabilizar mejor las oportunidades en el área contraria y que se mejore el ratio goles/remates que actualmente poseen los deportivistas. Mucho dependerá también del acierto que muestren los jugadores de ataque blanquiazules y en especial su nómina de delanteros, a la que se acaba de incorporar Toché como alternativa al titular Oriol Riera.