Víctor Sánchez dedicó buena parte del entrenamiento de ayer en Abegondo a ensayar el repliegue e insistió en la importancia de defender con las líneas muy juntas para dificultar al Barcelona la fluidez en su juego. El técnico madrileño quiere que el rival que esté en la posesión del balón tenga siempre un hombre encima para dificultarle sus movimientos. Víctor volvió a dar continuas consignas a sus jugadores y, como es habitual, participó como si fuera un futbolista más en muchos de los ejercicios. En los partidillos que organizó mezcló a los titulares con los suplentes, sin dar todavía pistas sobre cuál será el once que presentará el sábado en el Camp Nou.