La lesión de Celso Borges rompe la columna vertebral del Deportivo y deja a Víctor Sánchez sin uno de los pilares del equipo. El costarricense cayó lesionado con su selección poco antes del descanso del partido contra Haití. Tal y como informó el club coruñés, los servicios médicos del combinado tico se pusieron en contacto con los del Dépor para comunicar que había sufrido "un trauma distorsivo del pie izquierdo, el cual provocó una fractura del quinto metatarsiano; dicha fractura fue confirmada por tomografía". El club blanquiazul indicó que en cuanto el pivote aterrice a A Coruña, a principios de la próxima semana, será evaluado por el traumatólogo Rafael Arriaza.
Desde el Deportivo no detallan ningún plazo aproximado de recuperación, aunque podría rondar los dos meses, como mínimo. Si es así, Borges se perdería todos los partidos que faltan en lo que queda de año, seis en total, frente a Celta, Las Palmas, Sevilla, Barcelona, Eibar y Getafe. En el mejor de los casos reaparecería en las primeras semanas de 2016, siempre dependiendo de si pasa o no por el quirófano y de cómo vaya evolucionando en su plan de readaptación. De momento, los servicios médicos del club quieren esperar a examinarlo antes de anunciar si habrá cirugía, solución por la que optaron hace unos meses con Cezary Wilk para superar una lesión similar.
El polaco sufrió la fractura de la base del quinto metatarsiano del pie derecho durante el entrenamiento del 18 de marzo. Seis días después fue operado e inició su proceso de recuperación hasta que el 25 de mayo, más de dos meses después de caer lesionado, recibió el alta médica. Ya no volvería a jugar con la camiseta blanquiazul y, tras acabar contrato, fichó por el Zaragoza. Bastante más atrás, al 1 de septiembre de 2002, hay que remontarse para encontrar otro precedente similar en clave deportivista, el de Jorge Andrade. El central se rompió ante el Betis el dedo meñique del pie izquierdo, como ahora Borges, y no volvió a competir hasta cuatro meses después, el 7 de enero de 2003. Más reciente es el caso del madridista James Rodríguez, quien el pasado 4 de febrero se rompió el quinto metatarsiano del pie derecho ante el Sevilla y, tras pasar por el quirófano, reapareció dos meses después, el 5 de abril.
Borges llevaba acumulando muchos meses seguidos sin apenas descanso, con encuentros de máxima exigencia tanto en la Liga como con su selección, con la que disputó en verano la Copa de Oro. Tuvo menos vacaciones que nadie pese a lo cual cogió pronto un punto de forma óptimo para convertirse desde la primera jornada en uno de los indiscutibles de Víctor Sánchez. Lo utilizó en las once jornadas y siempre desde el inicio salvo en los encuentros ante Betis y Athletic, en los que el técnico optó por oxigenarlo para darle entrada en las segundas partes. Tras conocer la lesión del tico, el entrenador se puso en contacto con él para darle ánimos e interesarse por su estado. El pivote, por su parte, utilizó su cuenta de Twitter para mostrarse "triste" por quedar fuera de su selección, que el martes visita Panamá, pero al mismo tiempo "optimista" de cara a su recuperación.
