No me desdigo en nada de lo que escribí anteayer y de lo que vengo comentando desde hace bastante tiempo tanto en este periódico como en Radio Coruña sobre la alineación tipo del Deportivo a pesar de alguna crítica. Solo varía en un nombre según juegue con uno o dos puntas. Por lo tanto, para mí no fue una sorpresa la alineación presentada por el Deportivo. ¡Ya era hora!

En mi comentario previo al partido hablaba de los dilemas de Víctor en cuanto a la alineación para el derbi y casi tengo un acierto pleno. Comentaba que Juanfran y Luisinho deberían jugar por delante de los dos laterales para que el rival no nos creara tantas ocasiones por banda. Eso hace al equipo más compacto y más difícil de batir, además de mejorarlo en ataque porque son dos jugadores que centran bien. Así, también obligaríamos al Celta a progresar por el centro, por donde se presenta más dificultad por la densidad de jugadores. Todo eso lo consiguió el Deportivo por su banda izquierda con un alto porcentaje de aciertos en ataque y en defensa.

En la banda derecha no ocurrió lo mismo. Al jugar de salida Juanfran de lateral derecho apenas subió la banda y no se creó ninguna ocasión en forma de tiro o centro, hasta que salió Laure (en ese momento el acierto fue total) y adelantó su posición con una ocasión fantástica con tiro al palo minutos antes de su lesión. En defensa esta banda pasó apuros, menos mal que a Nolito el trabajo defensivo le anuló su salida más efectiva en progresión hacia el centro para poder tirar. (Creo recordar que todos los córners sacados por el Celta fueron desde esa esquina).

También comentaba que, si salía con dos puntas, Bergantiños tenía que ser el acompañante de Mosquera para tratar de anular el centro del campo del Celta. Que el mejor acompañante de Lucas sería Jonathan Rodríguez por su velocidad porque así ganaríamos más peligrosidad en ataque, ocupando los espacios a la espalda de su defensa. Así fue. Lo que pasa es que el Deportivo le imprimió al partido una gran intensidad tanto ofensiva como defensiva en todas sus acciones desde el primer minuto de juego, llegando al área contraria con velocidad e impidiendo que el Celta creara juego.

En los primeros minutos del segundo tiempo la presión del Celta obligó al Deportivo a jugar a la contra, pero muy bien posicionado en su campo, para volver a apretar en campo contrario hasta el final vaciándose casi por completo.

Solo pido que la intensidad imprimida al juego durante los 90 minutos sea así siempre y que no sea solamente en el derbi y frente al Madrid y Barcelona (por desgracia, eso será así siempre en todos los equipos).

Navarro, innecesario el penalti que cometiste, máxime cuando Iago Aspas no tenía el balón controlado y corría de dentro hacia afuera. Un partido más Arribas estuvo inconmensurable en el juego aéreo. Jonathan, cuidado que te van a poner la etiqueta de piscinero.