Se acaban los elogios para calificar la temporada que está haciendo Lucas Pérez, cuyo registro goleador -nueve dianas en las primeras trece jornadas- está a la altura de los mejores artilleros históricos del Deportivo en la máxima categoría. Solo Pahíño, que anotó doce goles en los primeros trece partidos de la temporada 1955-56 y diez en los de la 1954-55, y Roy Makaay, que celebró una decena en el mismo número de encuentros del curso 2002-03, superan la estadística del coruñés. Ni siquiera Bebeto mejora sus números, solo los iguala, ya que tanto en la campaña 1992-93 como en la 1995-96 festejó nueve dianas en las primeras trece citas del campeonato, una marca idéntica a la actual de Lucas.

Para encontrar un futbolista blanquiazul con un inicio anotador tan productivo hay que remontarse casi tres lustros, a la época más dorada del Deportivo, entonces aspirante a todo tanto en la Liga como en la Champions. En el ejercicio 2002-03 el holandés Makaay acabó conquistando la Bota de Oro gracias a los 29 goles que anotó en su última temporada en Riazor, diez de los cuales los firmó en las primeras trece jornadas. Meses antes de fichar por el Bayern Múnich, el internacional se destapó con un arranque de campaña sensacional, similar al que ahora está firmando Lucas. La efectividad del coruñés está por encima de la de varios de los mejores delanteros que pasaron por Riazor en los últimos años, como el andaluz Diego Tristán, cuyo mejor arranque fue en el curso 2001-02, con siete dianas en los primeros trece partidos, o el uruguayo Wálter Pandiani, que celebró seis en la misma secuencia de encuentros de la campaña 2003-04.

El mérito de Lucas es todavía mayor porque todos sus tantos le han dado puntos al Deportivo. Siempre que marca, el equipo coruñés gana o, como mínimo, empata. El pasado fin de semana, en Las Palmas, el de Monelos asistió a Cani en la acción del 0-1, que acabó con el autogol de David Simón, y en el minuto 91 sentenció el partido firmando el 0-2 definitivo a pase de Fayçal Fajr. Ocho de sus nueve tantos fueron ante rivales diferentes, ya que solo repitió en el doblete que le endosó al Espanyol en el duelo de la sexta jornada disputado en el estadio de Riazor.

Cuarto en el Pichichi

Inauguró su cuenta en Mestalla, luego volvió a mojar en Vallecas, después celebró dos ante el conjunto perico, y a continuación volvió a ver puerta en casa ante el Athletic, para luego enlazar cuatro jornadas seguidas marcando ante Atlético, Levante, Celta y Las Palmas. En total, nueve goles que lo sitúan cuarto en el trofeo Pichichi del campeonato de Liga, solo por detrás de Neymar (14), Luis Suárez (12) y Aduriz, que ayer llegó a la decena gracias a su triplete contra el Rayo Vallecano. A continuación en ese ranking de artilleros aparece el coruñés con sus nueve tantos, los mismos que llevan Cristiano Ronaldo y Agirretxe.

Lucas suma y sigue para seguir ayudando al equipo con sus goles y, de paso, aspirar a dar el gran salto para inscribir su nombre junto al de los grandes artilleros de la historia del Deportivo en Primera División. Conquistar el trofeo Pichichi vestido de blanquiazul -como antes hicieron Bebeto (29 goles, temporada 1992-93), Diego Tristán (21, 2001-02) y Roy Makaay (29, 2002-03)- es a día de hoy un objetivo imposible no solo para Lucas sino para cualquier futbolista que no juegue en alguno de los grandes: Barcelona, Madrid y Atlético, fundamentalmente. Esa no es, ni mucho menos, la meta del coruñés. Su única aspiración es seguir trabajando para el equipo y ayudando a sus compañeros para, entre todos, alcanzar lo antes posible el objetivo inicial de la permanencia.