Oriol Riera marcó por fin y en Palamós puso punto y final a su falta de gol. El catalán cree que es cuestión de rachas. "Ha habido situaciones de muy mala suerte con los palos, pero la suerte se busca, son momentos puntuales que un jugador tiene", comentó el atacante, quien añadió que ningún futbolista de la plantilla puede "bajar los brazos".