Cambio en la delantera sabiendo que el Sevilla no permitiría tanta distancia a la espalda de la defensa. Víctor optó por un perfil centrado en el juego aéreo, de buscar espacios libres con los que Lucas obtendría mayor libertad de movimientos. Sobre todo, Víctor buscaba jugar más directo por la gran presión del Sevilla en el mediocampo. Todo eso se fue al traste a los siete minutos con la lesión de Oriol y volvimos al once de los últimos partidos.

Como se esperaba, el Sevilla no dejó huecos e intentaba llevar el control del partido, con salida de balón de lado a lado, mientras el Dépor mantenía el nivel de intensidad y presión de los últimos encuentros. Eso sí, con los apuros lógicos de enfrentarse a un muy buen equipo. Destacar el gran trabajo de Cani y Luisinho en la ayuda a los laterales en las jugadas por banda, haciendo sentirse más cómodo al equipo y dejando muy pocos espacios libres.

Fue una primera parte muy intensa con ventaja en el marcador y una segunda que, con los cambios, el Sevilla obligó a buscar más frescura en defensa con la entrada de Laure. La presión de Lucas y Jonathan ya no era la del primer tiempo y el Sevilla empató en un despiste de juveniles. Al final, sufrimiento pero merecido punto.