Los números de los deportivistas y la racha de resultados después de dos victorias y un empate en tres partidos hacen que los jugadores blanquiazules consideren que el equipo llega en un momento dulce a uno de los encuentros más complicados de la temporada. "Es un partido bastante difícil, pero tenemos la ilusión de sacar algo y el momento es bueno, porque el equipo está bien. Es el momento ideal para ir a jugar con el Barcelona", resumió ayer Luisinho después del entrenamiento en Abegondo.

La plantilla afrontará la visita al Camp Nou de manera distinta a cómo lo hizo el curso pasado gracias a su buen inicio de campeonato. "No tiene nada que ver. El año pasado nos jugábamos la categoría, era un partido tenso. Este año, perder o ganar no va a alterar nada en la tabla. El año pasado había una presión extra y quedamos contentos por quedarnos en la categoría. Fue un partido tenso y del que te vas a acordar el resto de la vida", reconoció el portugués, que no disputó el encuentro por sanción.