El partido de mañana frente al Eibar, el último antes del parón invernal, puede ser el de la consolidación del Deportivo en la zona noble de la clasificación. Si gana al conjunto armero, se elevaría hasta los 26 puntos y distanciaría a un rival del que, ahora mismo, solo le separan dos puntos. Sería la mejor forma de irse de vacaciones, instalado en los puestos de privilegio y con el objetivo de la permanencia más que encarrilado. Por eso Víctor Sánchez del Amo y sus futbolistas consideran fundamental superar con éxito el encuentro de mañana, "uno de los más importantes de la temporada", a juicio de Alejandro ArribasAlejandro Arribas. El Dépor viene de empatar nada más y nada menos que en el Camp NouCamp Nou, donde compitió con una enorme intensidad de principio a fin. Mañana se medirá a un equipo bastante más modesto que el culé, aunque eso no restará ni un ápice de motivación a los blanquiazules. "Tenemos muchas más ganas que ante el Barcelona, porque sabemos que este es nuestro partido", añade el central.

Con solo dos derrotas en las quince jornadas que se llevan disputadas, el Deportivo está superando con creces todas las expectativas, incluso las más optimistas. Si gana mañana sumaría seis victorias, solo una menos de las que celebró en toda la temporada pasada y que le bastaron para evitar el descenso. La consigna es no relajarse y el mejor ejemplo es la situación que vivió el Eibar en carne propia hace unos meses. Llegó al ecuador del campeonato con una marca sobresaliente, 27 puntos, pero en la segunda vuelta se desinfló hasta el punto de acabar bajando a Segunda. El descenso administrativo del Elche salvó después al conjunto armero de tener que competir en la categoría de plata y, de nuevo en Primera, está siendo otra de las sensaciones de esta campaña. "Está haciendo las cosas muy bien. Está arriba en la tabla y atraviesa un buen momento, igual que nosotros", explica Arribas.

Víctor y sus jugadores siguen fieles al discurso con el que empezaron la temporada. No se saldrán del guión hasta que matemáticamente tengan garantizada la permanencia, aunque son conscientes de que, si siguen rindiendo como hasta ahora, podrán soñar con algo más. "Hasta que tengamos los 42 puntos no podemos pensar en nada más", zanja el madrileño, centrado única y exclusivamente en el encuentro de mañana. "Queremos irnos de vacaciones tranquilos, con 26 puntos, y comer el marisco y todo en Navidad con la moral alta, bien en la tabla y encaminados hacia el objetivo que es la salvación". Tumbar al Eibar no será nada fácil porque los armeros "están haciendo las cosas bien" y, además, llegarán a Riazor con la autoestima por las nubes tras haber remontado una desventaja de tres goles en la eliminatoria de Copa frente a la Ponferradina, algo que "influirá positivamente en su moral".