Misma idea de los últimos partidos, con el cambio de Luis Alberto por Jonathan. Con ello se perdió en velocidad y brega, pero se ganó en calidad y control de la pelota. Los primeros minutos fueron de alta presión por parte de los dos equipos, en los que el Dépor buscaba balones a la espalda de la defensa contrario pero no conseguía crear demasiado peligro. Fue así hasta el saque de esquina de Lux a Lucas, del mismo estilo que algunos anteriores, y que provocó un riguroso penalti que hizo llegar al Dépor al descanso con ventaja. Mismos jugadores y mismas sensaciones en la primera parte en el comienzo de la segunda. Con la entrada de Cartabia, Fayçal pasa a la posición de Luis Alberto, pero con mas ayudas al centro del campo cuando el equipo coruñés perdía el balón. Me sorprendió este cambio al no sacar primero a Luisinho, porque las posibilidades de que le muestren la segunda son altísimas, y más con la manía que tiene de tirarse cuando le quitan el balón.

El gol de Arribas tranquilizó al Deportivo, que con la caída del marroquí a la banda izquierda pasó a defenderse con cuatro para salir rápido a la contra con Lucas Pérez. Con Domínguez volvió a equilibrar el centro del campo y mantuvo el tipo en los minutos finales.