El Deportivo disfruta de su Navidad más dulce de los últimos años, cómodamente instalado en los puestos que dan derecho a jugar en Europa la próxima temporada y, lo que es más importante, con una renta de doce puntos sobre el descenso, la mayor de la temporada. Los números del equipo coruñés y, sobre todo, las sensaciones que transmite invitan a la afición blanquiazul a ilusionarse con un objetivo más ambicioso que la mera supervivencia en la categoría. Con 26 puntos a falta todavía de tres partidos para que finalice la primera vuelta, el Dépor empieza a ver cerca la meta con la que comenzó el curso. Alcanzar lo antes posible a los 42 puntos que en teoría garantizan la permanencia es el deseo tanto del cuerpo técnico como de los jugadores. Hasta entonces, prefieren aferrarse al discurso inicial y no hablar de otra cosa que no sea la salvación. Sin embargo, el triunfo del pasado sábado frente al Eibar Eibar deja a los blanquiazules en una situación lo suficientemente privilegiada como para abrir un nuevo horizonte de cara al Año Nuevo, el de pelear abiertamente por Europa.

►Siete jornadas sin perder. Para encontrar la última derrota del Dépor hay que remontarse a hace dos meses, concretamente al 24 de octubre, cuando cayó con justicia en La Rosaleda (2-0) La Rosaleda. Además del Málaga, solo el Sporting de Gijón, que ganó sin merecerlo en Riazor (2-3)Riazor , fue capaz de tumbar al equipo coruñés. Esas dos son sus únicas derrotas en 16 jornadas.

►Solidez y equilibrio. El Dépor se está comportando como un equipo bien armado tanto en defensa como en ataque. Es capaz de juntarse con rapidez, casi nunca se desordena, apenas concede facilidades a los rivales y sabe esperar su momento para hacer daño en la fase ofensiva, sobre todo aprovechando los espacios para explotar la velocidad de Lucas Pérez a la contra.

►Los mismos puntos en casa que fuera. El Dépor se siente más cómodo como visitante que como local, pero su regularidad es enorme tanto en casa como fuera. De hecho, ha sumado los mismos puntos en su estadio y en sus salidas (13).

►Competitivo, juegue quien juegue. Víctor Sánchez del Amo está confiando últimamente en un bloque bien definido de futbolistas, sustentado en pilares como Sidnei, Arribas, Fernando Navarro, Pedro Mosquera, Álex Bergantiños o Lucas Pérez. Sin embargo, los que entran en el once, como Luis Alberto el pasado sábado contra el Eibar, mantienen el nivel igual de alto que sus compañeros.

►Individualidades en crecimiento. El éxito del Dépor es, sobre todo, colectivo, pero hay algunos futbolistas que están marcando las diferencias, como los coruñeses Mosquera y Lucas, dos de las sensaciones de la Liga.