Víctor Sánchez del Amo cruza los dedos con la esperanza de poder contar con Alejandro Arribas para el trascendental encuentro de mañana en Riazor frente al Levante (20.30 horas). El central seguía ayer con molestias en el muslo derecho, producto de un bocadillo que recibió el miércoles en un choque fortuito con Jonathan Rodríguez. Ayer salió al césped junto a sus compañeros, todavía con algo de cojera, y solo pudo completar el tramo inicial del entrenamiento. Tras comprobar que todavía no estaba al 100%, los médicos le invitaron a que se retirara para no forzar y evitar cualquier riesgo. En principio, se trata de una fuerte contusión que no le debería apartar del partido de mañana. Los doctores confían en que el dolor remita a tiempo y, si fuese necesario, lo infiltrarán para que pueda competir. De momento, es duda, aunque si no surge ningún contratiempo lo normal es que esté a disposición de Víctor ante el conjunto granota.

La evolución de Arribas preocupa especialmente por las numerosas bajas que el técnico tiene en la línea defensiva. Sidnei Rechel está evolucionando muy bien y los servicios médicos tienen la esperanza de recuperarlo a tiempo para después del parón con vistas a que pueda reaparecer el 2 de abril ante el Celta. Además del brasileño, otros tres defensas -Alberto Lopo, Manuel Pablo y el fabrilista Róber- no están disponibles. El catalán abandonó antes de tiempo el entrenamiento del miércoles por culpa de unas molestias en el tobillo derecho. Ayer ni siquiera pisó el césped. Sufre un pequeño esguince, sin importancia, pero lo suficientemente incómodo como para apartarlo del duelo ante el colista. Manuel Pablo y Róber están en la fase inicial de sus recuperaciones tras lesionarse el pasado sábado en el Calderón, donde el central del filial hizo su debut en Primera.

La buena noticia en lo que afecta a la zaga es que Víctor recupera a sus dos laterales titulares, Juanfran y Luisinho, que se perdieron el partido ante el Atlético por sendos problemas físicos leves. Ambos están a una tarjeta amarilla de la suspensión, al igual que Lopo y Fernando Navarro. El lateral catalán volverá mañana al once para jugar de central junto Arribas, si es que finalmente el madrileño está en condiciones de competir. En caso contrario, Víctor tendría que improvisar para recomponer el centro de la defensa, probablemente echando mano de Álex Bergantiños, quien ya cumplió con creces en esa demarcación en anteriores temporadas ante situaciones de urgencia.

La rodilla frena a Pletikosa

Menos dudas, ninguna, hay sobre la participación de Germán Lux. El argentino trabajó con menor intensidad esta semana por culpa del golpe en la rodilla derecha que recibió en la recta final del encuentro del Calderón. Optó por rebajar las cargas de trabajo para no forzar, pero por simple precaución. Mañana volverá a defender la meta coruñesa con el objetivo de no encajar gol después de doce jornadas consecutivas lamentando al menos un tanto en contra. En cambio, el que no se pondrá esta vez los guantes será Stipe Pletikosa. Lleva dos días seguidos sin salir al campo por culpa de unas molestias en la rodilla derecha que le obligarán a ser baja ante el Levante. Por tanto, el asturiano Manu Fernández será el suplente de Poroto. El plan de Víctor para mañana es aparcar el trivote, sentar a Álex Bergantiños y recuperar el sistema 4-4-2 por el que apostó durante casi toda la primera vuelta, con una línea de cuatro por delante Lux, la formada por Juanfran, Arribas, Navarro y Luisinho; Mosquera y Borges en el doble pivote; Cani y Fayçal en las bandas; y Luis Alberto y Lucas como pareja ofensiva.