El Deportivo está ya más tranquilo tras el triunfo del pasado sábado frente al Levante en Riazor, pues eses tres puntos colocan a los blanquiazules en la décima posición y a ocho puntos de los puestos de descenso a falta de ocho jornadas para que concluya el campeonato. Los 36 que suma en la actualidad no parecen suficientes para la mayoría, aunque son numerosos los técnicos de los equipos implicados en la parte baja de la tabla que cifran en 36 o 37 la cota para obtener la permanencia.

Las perspectivas son ahora más positivas para el deportivismo, sobre todo animado una vez que el equipo rompió la racha negativa tras trece partidos consecutivos sin ganar en la Liga, lo que le llevó de estar flirteando con los puestos que dan derecho a ocupar la Liga Europa a ocupar la decimotercera plaza tras la disputa de la jornada 29. Este triunfo ante el Levante aupó a los blanquiazules hasta la décima y un punto más lejos del descenso que una semana atrás.

Además de los seguidores, también los futbolistas estaban más relajados después de la victoria del sábado. "Necesitábamos este triunfo. Lo merecíamos", escribió Lucas Pérez en su cuenta de Twitter. El goleador blanquiazul, que se quedó sin marcar, fue uno de los protagonistas de la jugada del segundo gol, pues suyo fue el disparo que se estrelló contra el poste antes de rebotar en la espalda de Mariño e introducirse en la meta del cuadro granota.

Un rival directo menos y las perspectiva de que en el caso de que sean necesarios más puntos de los que aventuran los técnicos, por delante están dos adversarios de la parte baja de la tabla que todavía tiene que pesar por Riazor: Las Palmas -próximo visitante al coliseo coruñés- y Getafe. Posteriormente los deportivistas se medirán a los equipos de la zona noble de la clasificación. Para algunos, a sí las cuentas estarán más claras, ya que alcanzarán los 42 puntos.

El triunfo frente al Levante también permitió a los blanquiazules superar la puntuación que obtuvieron durante toda la temporada pasada, que culminaron con 35 tras el empate a última hora en el Camp Nou frente a un Barcelona ya campeón. Quizá por eso, y para liberarse de tensión festejaron el sábado los deportivistas el trascendental triunfo. Por un lado rompieron la racha negativas de trece jornadas y por otra consideraban que el objetivo estaba ya alcanzado, o que están a un paso de hacerlo. Son los números más negativos sería cuestión de dos triunfos, posibles con los partidos que faltan, pero demasiados para los más negativos, pues hasta la fecha los blanquiazules solo fueron capaces de sumar siete en toda la competición.