Riazor tiene la última palabra, la definitiva, en la salvación del Deportivo. Mañana, a las 20.30 horas, el equipo coruñés buscará ante su público la victoria que necesita para sellar de una vez por todas el objetivo de la salvación. Si vence a la Unión Deportiva Las Palmas, enlazaría dos triunfos seguidos en casa por primera vez en la temporada. Hasta ahora, ha sido incapaz de ganar de forma consecutiva como local. De los quince partidos que disputó en A Coruña, solo en cuatro salió airoso, ante Espanyol (3-0), Celta (2-0), Eibar (2-0) y Levante (2-1). Cuatro victorias en Riazor, todas salpicadas a lo largo de la campaña, nunca seguidas. El equipo blanquiazul es uno de los tres de la máxima categoría, junto a Betis y Sporting de Gijón, a los que se le resisten esos dos encuentros consecutivos, como mínimo, ganando en su propio feudo. Mañana, contra Las Palmas, el Dépor buscará lo nunca visto esta temporada: enlazar dos triunfos en Riazor. "Sería algo muy bueno para nosotros el hecho de celebrar con nuestra gente dos victorias seguidas", reconoció ayer Celso Borges.

"Lo valoramos muchísimo", añadió el costarricense tratando de dar la máxima importancia a ese objetivo de sumar otros tres puntos en casa a los tres de hace quince días frente al Levante. En la presente campaña el Deportivo no ha acabado de convertir Riazor en un verdadero fortín. 20 puntos en los 15 encuentros que disputó de local es su balance hasta el momento, discreto, pero suficiente como para navegar en una zona tranquila de la clasificación gracias a los 17 puntos que se embolsó a domicilio. Ante Las Palmas tiene la oportunidad de alcanzar la salvación, no matemática, pero sí virtual, teniendo en cuenta que este año 40 puntos asegurarán evitar una de las tres últimas plazas de la tabla.

Guardan la calculadora

Lo saben los futbolistas, aunque prefieren guardarse la calculadora hasta cruzar definitivamente la meta. "El casi no nos da la seguridad", matiza Borges, quien advierte de que "hasta que matemáticamente no esté cerrado" el equipo no estará del todo "tranquilo". El Dépor está preparando a conciencia el encuentro de mañana, consciente de que llega a Riazor un rival "bastante equilibrado" y que "ha mejorado muchísimo" en las últimas semanas. Lo demuestran sus resultados, con cinco victorias en las seis jornadas más recientes. Sin embargo, Borges apuesta convencido por el Deportivo. "Tengo la confianza de que va a salir bien", manifestó el centrocampista tico tras el entrenamiento de ayer en Abegondo.

Si es capaz de ganar mañana, el equipo coruñés cruzará con éxito la meta con la que inició el curso sin necesidad de tener que esperar a las últimas jornadas, como ocurrió la pasada temporada, en la que tuvo que obtener un empate en el Camp Nou en el encuentro definitivo para no perder la categoría. Este año, en cambio, tiene casi en su mano el objetivo con holgura, lo que da todavía más mérito a la temporada que está haciendo el Dépor. "La imagen del equipo en general durante toda la campaña ha sido muy buena. A veces no hemos conseguido los resultados que esperábamos, pero siempre hemos sido muy competitivos", argumenta el internacional costarricense. Por suerte, el arranque fue "bastante bueno" y eso generó un colchón de puntos que le dio tranquilidad y confianza al equipo cuando llegó esa mala racha de trece jornadas consecutivas sin ganar: "Empezamos con mucha fuerza y eso nos allanó bastante. Esa aceleración nos ayudó a mantenernos bastante bien".