Tal día como hoy hace 25 años el Deportivo ponía punto y final a una larga travesía alejada de la máxima categoría. Fueron 18 temporadas en los que el club blanquiazul militó en Segunda División en incluso en Segunda B y Tercera, rozando el ascenso en varias ocasiones. En el recuerdo de los aficionados aquella tarde de domingo en Riazor estaban los frustrados regresos ante Tenerife y Rayo Vallecano.

Deportivo y Murcia se enfrentaban por la última plaza de ascenso directo después de que el equipo dirigido por Arsenio Iglesias desde el banquillo protagonizase una remontada en la segunda vuelta que lo colocó de lleno entre los aspirantes después de estar prácticamente descartado.

A pesar de la victoria final (2-0), Riazor tuvo su habitual dosis de incertidumbre, agravada por lo que sucedió en la grada de Preferencia. No había marcado todavía sus goles el serbio Stojadinovic cuando se declaró un violento incendio. Hubo que parar el partido y evacuar a los aficionados, que esperaron en el césped, pero cuando se reanudó llegaron los tantos que colocaron al Deportivo de vuelta a la Primera División. Después llegaría la etapa más brillante en la historia del club, cuando se consiguió de una vez por todas quemar el meigallo.