El Deportivo nunca ha conseguido puntuar tres temporadas consecutivas en el Camp Nou. Lo más cerca que estuvo fue cuando encadenó tres victorias en cuatro campañas (2000-01, 2002-03 y 2003-04), pero los dos empates seguidos de los últimos años le colocan ante la posibilidad de una racha de resultados nunca alcanzada. "Puntuar una vez es complicado, hacerlo dos, todavía más, y la tercera sería increíble. Vamos con muchísima ilusión, la gente está trabajando de forma increíble y vamos a hacer un partido muy serio", reconoció ayer Pedro Mosquera, presente en el empate de la temporada pasada, pero no en el que en mayo de 2015 selló la salvación del equipo. "Los dos últimos años se puntuó allí, yo he tenido la suerte también de puntuar con el Getafe en otros años y siempre se puede sacar algo positivo. Es lo que vamos a intentar", añadió el coruñés.

Las opciones de puntuar de los deportivistas pasarán por un planteamiento que Gaizka Garitano comenzó a ensayar en la sesión del lunes. Basculaciones acompasadas, ayudas constantes y dos líneas muy juntas de cuatro jugadores se perfilan como el antídoto al torrente ofensivo azulgrana. "Estamos trabajando poco a poco eso, estamos trabajando las basculaciones y que haya pocos espacios entrelíneas", reconoció ayer Mosquera sobre el plan previsto en el Camp Nou.

El plan trazado por Garitano pasa por dejar pocos resquicios a los atacantes de Luis Enrique, entorpecerlos en una maraña de jugadores como ya le ocurrió a Simeone en el partido ante el Atlético, aunque Mosquera ve muy pocas similitudes entre el conjunto azulgrana y el rojiblanco. "Son dos equipos muy diferentes el Atlético y el Barça", puntualizó. "Evidentemente son dos equipos de primer nivel, pero muy diferentes. Contra el Barça sabes que a priori no vas a tener el balón y que vas a tener que defender mucho más. No son partidos muy similares", reflexionó el centrocampista sobre lo que espera a los deportivistas en el Camp Nou.

El principal desafío, según el coruñés, será frenar la ambición ofensiva del Barcelona y lograr tener la suficiente fluidez como para ponerlo en aprietos, algo parecido a la fórmula empleada la temporada pasada cuando se remontaron los dos tantos iniciales de los azulgrana. "La idea es muchas ayudas cuando no tengamos el balón y luego cuando tengamos el balón ser valientes, intentar jugar y hacer nuestro partido, con nuestras señas de identidad y dar el cien por cien todos", subrayó Mosquera.

Garitano prepara para ello dos líneas de cuatro jugadores muy compenetradas en las basculaciones y en las ayudas, de manera que logre impacientar a un equipo que necesita ganar después de su derrota en Vigo. "No creo que les afecte mucho el haber perdido el otro día fuera de casa", manifestó Mosquera en relación a la derrota barcelonista ante el Celta. "Al final es un equipo que está muy acostumbrado a jugar en su estadio y desgraciadamente creo que eso no les va a afectar, así que tendremos que dar el cien por cien o más para sacar algo positivo allí. Me espero un Barça como el de siempre, al mejor Barça", remarcó.

Luis Enrique, sin embargo, no podrá contar con algunos de sus jugadores titulares (Sergi Roberto y Jordi Alba se lesionaron con la selección) y tiene la duda de Messi, ausente en las últimas jornadas y cuya meta es estar en perfectas condiciones para el encuentro de Liga de Campeones ante el Manchester City. "Lo malo es que si no está Messi hay otros jugadores buenísimos que pueden hacerlo muy bien y tienen muchísimo nivel", lamentó el coruñés.