El regreso de Álex Bergantiños a las convocatorias y, sobre todo, a las alineaciones ha convertido al centro del campo en la posición más codiciada del equipo tras la llegada de Pepe MelPepe Mel al banquillo del Deportivo. Nada más aterrizar, el técnico madrileño se propuso recuperar a Pedro Mosquera de la depresión que atravesaba desde mediados de la temporada pasada. El mediocentro coruñés respondió y volvió a ganarse la titularidad aprovechando también la lesión de Guilherme.
La recuperación del brasileño tras cuatro partidos de ausencia, sin embargo, acrecienta la competencia en una demarcación que tenía a sus dos inquilinos claros. Guilherme y Borges se afianzaron como la pareja en el doble pivote tras la pérdida de protagonismo de Mosquera y la falta de oportunidades de Álex Bergantiños, pero la situación ha dado un giro por completo en las últimas semanas.
Mel ha recuperado a Mosquera, pero también a Bergantiños, que ha encadenado dos partidos como titular por primera vez en la temporada. El canterano allanó el camino del madrileño a su llegada y éste se lo agradeció con la confianza que no había depositado en él Garitano. Brilló contra el BarcelonaBarcelona, con gol de la victoria incluido, y cumplió el domingo en el derbi, lo que aumenta más si cabe las incógnitas existentes alrededor de esta posición.
Ante el Valencia el domingo de la semana que viene parece complicado que Mel repita la fórmula que empleó ante el Celta, en la que alineó a Mosquera y Álex como mediocentros y dejó a Borges en una posición intermedia entre la del mediapunta y el centrocampista. El resultado no fue el esperado y está por ver también si Guilherme recupera el peso que tenía en el equipo antes de la llegada del madrileño al banquillo deportivista.
