Celso Borges (en la imagen superior, junto a Sidnei) fue el único deportivista que logró rematar entre los tres palos frente a la Real Sociedad. Su cabezazo, que atajó sin apuros Rulli, llegó en el minuto 86. Fue la ocasión más clara de los coruñeses, especialmente atascados en ataque. La Real tuvo mucha más llegada, como demuestra la estadística de saques de esquina. Once lanzó el conjunto vasco, mientras que el Dépor solo envió una vez el balón desde el banderín. Un ejemplo del gris partido de los de Mel en San Sebastián.