Un Villarreal crecido derrotó al Sporting de Gijón, al que acercó al descenso en un encuentro resuelto al principio del segundo tiempo, cuando los locales no dieron opciones a un rival que había plantado cara mediado el primer periodo y que reaccionó tarde en la reanudación.

De esta forma, el equipo castellonense se mantiene firme en su lucha por ser quinto, mientras que el conjunto asturiano ha dado un paso atrás casi definitivo en su intento de permanecer.

El 1-0 llegó cuando peor estaba el Villarreal, pero la clave estuvo en el 2-0, logrado en la primera ocasión de la segunda mitad y que dejó sin recursos al Sporting.

El Villarreal planteó el encuentro con varios cambios respecto al equipo que había ganado a domicilio al Atlético, algunos forzados, pero otros decididos por el técnico Fran Escribá, que dio entrada de inicio a Soldado, Bakambu y Roberto Soriano como hombres más ofensivos.

En el Sporting, su entrenador, Juan Fancisco Ferrer Rubi, presentó una defensa con tres centrales y un centro del campo muy poblado, con cuatro futbolistas.

El partido cambió radicalmente tras un disparo de Moi al larguero. Sin embargo, en la siguiente jugada, un fallo defensivo del Sporting permitió que Soldado, solo ante Cuéllar, hiciera el 1-0, lo que propició que el Villarreal recuperase el control del juego hasta el descanso.

La segunda parte empezó con un gran pase de Dos Santos a Bakambu, que en el minuto 47 se plantó ante Cuéllar para marcar el 2-0 y poner el partido más de cara para el Villarreal.

El gol hizo crecer al equipo local y deprimió al Sporting. Soldado pudo marcar poco después y falló, pero Bakambu, a pase del propio Soldado, hizo el 3-0 antes de la hora de partido, ante un Sporting que había cambiado su esquema y pasó a jugar con dos centrales, pero que no encontró la forma de reaccionar.