Bicho regresó esta temporada al Deportivo tras su cesión al Racing de Ferrol durante el curso pasado y brilló en buena parte de la pretemporada, pero Pepe Mel no le abre de momento las puertas del primer equipo; tampoco a Saúl, que la pasada campaña pasó por el Girona y el Mallorca. Ambos están pendientes de sendas cesiones, pero hasta la fecha ninguna de las peticiones que llegaron a la plaza de Pontevedra satisface a los futbolistas.

Los jugadores y el club prefieren jugar en Segunda División, pero no hay ofertas, por eso no se descarta, especialmente en el caso del atacante de Sada, que puedan recalar y reforzar al Fabril en su regreso a Segunda División B. Para que jueguen en esta categoría es mejor que lo hagan en el filial, aseguran desde la entidad club blanquiazul.

Los técnicos también tienen en cuenta la opinión de los futbolistas, ya que entienden que su formación será mucho mejor si militan en Segunda División. Sin embargo, la experiencia del año pasado con el lateral zurdo cántabro no fue positiva, ya que no encontró oportunidades ni en el Girona -acabó ascendiendo a Primera-, ni en el Mallorca -al final se fue a Segunda División B. Por eso no descartan tenerlos cerca, en el Fabril.

Tampoco rechazaban ayer la posibilidad de que Pinchi fuese cedido al Sevilla Atlético, que sí está interesado en la incorporación del fabrilista, siempre y cuando renueve su contrato. Los andaluces buscan un equipo que les permita mantener la plaza en esta categoría por lo que supone de ingresos, especialmente por televisión. Ayer, los hispalenses obtuvieron la cesión del centrocampista Miguel Olavide, procedente de Osasuna. El futbolista pamplonés tiene 21 años y formó en la cantera de Tajonar, ciudad deportiva del equipo de El Sadar, acumula 64 partidos oficiales con el primer equipo navarro.