El Deportivo tiene plantilla "para estar tranquilo en Primera División" aseguró Richard Barral, director deportivo del club coruñés, en la sala de prensa de Riazor y en su análisis tras el cierre del mercado de fichajes el pasado viernes. El máximo responsable de la confección del primer equipo blanquiazul valoró a los integrantes del equipo que está a las órdenes de Pepe Mel, si bien reconoció que hace un año, cuando evaluó el plantel que el club puso a disposición de Gaizka Garitano, había hecho una valoración similar. "El año pasado dije que había una buena plantilla, lo que pasa es que el rendimiento no fue el esperado", dijo. La guinda de los fichajes fue la llegada de Lucas, el principal objetivo, "un fichaje muy difícil y complicado", que la entidad blanquiazul alcanzase el límite salarial. "Lo hemos gastado todo", certificó Barral.

Alrededor de 36 millones de euros le cuesta al Deportivo mantener las plantillas del primer equipo y del Fabril tras una inversión de "diez o doce millones más que el año pasado", cuando los técnicos deportivistas disponían de 24 millones. Durante este verano el club adquirió en propiedad a Guilherme, Carles Gil (había una cláusula), Cartabia, Schär y Gerard además de obtener la cesión de Valverde, Bakkali, Adrián, Lucas y la de Pantilimon a última hora para suplir al lesionado Rubén. Diez incorporaciones y un solo traspaso, el de Pablo Insua al Schalke 04, aunque tuvieron la oportunidad de vender a Andone a un equipo inglés. "Tuvimos dos ofertas de la Premier -Burnley y Brigthon-, pero solo uno se mantuvo hasta el final, pero el presidente quiere que el club crezca y no debilitarse", explicó Barral.

La venta del delantero internacional rumano hubiese permitido unos ingresos importantes, según el director deportivo, "hubiésemos tenido una plusvalía importante", reconoció, por un futbolista que le costó 4 millones de euros hace un año y por el que podría haber percibido 18 millones, la última cifra que ofreció el Brigthon, aunque el 30% de esta cantidad acabaría en las arcas del Córdoba, club de procedencia del atacante. "Nosotros solo vamos a vender en tres casos: que paguen la cláusula de rescisión; que tengamos un recambio de un nivel similar al futbolista que se marche y a menor precio, y que el futbolista quiera marcharse y lo ponga muy complicado". En el caso de Andone no se dio "ninguna de estas tres condiciones", según Richard Barral.

La cesión de Lucas en la víspera del cierre del mercado supuso la culminación al trabajo desarrollado por la secretaría técnica, pues el de Monelos era el fichaje estrella. "Lo quisimos fichar, pero a la tercera ya vimos que era inviable porque no podíamos llegar a las cifras que pedía el Arsenal y desde entonces apostamos por la cesión", que es como llegó el goleador coruñés. "No quiero ni pensar en lo qué pasaría si no llega a venir", reconoce. Con él se acabó el dinero y parte de buena culpa la tiene el PSG, según Barral. "El fútbol ha inflacionado este año de una manera desmesurada tras el traspaso de Neymar al PSG, una operación que provocó una burbuja brutal en cascada" y perjudica a los equipos más pequeños. En este caso, el Deportivo, que se quedó sin cash. Y sin dinero tuvo que acudir al mercado de forma urgente para encontrar un recambio para el lesionado Rubén, se lastimó en un dedo de la mano derecha durante el entrenamiento del pasado viernes. Apenas tenía el Deportivo doce horas para fichar a un sustituto y además no podía pagarlo. Richard Barral acudió a Gino Pozzo, propietario el Watford -también del Udinese- que facilitó la llegada de Pantilimon. "Quiero agradecerle el trato porque llega gratis y el Watford afronta una parte del salario" del portero rumano. "Tenemos dos buenos porteros en el filial, Álex Cobo y Francis, pero no nos podíamos arriesgar a que también le pasase algo a Tyton y dejarles la responsabilidad a dos jóvenes que están en el filial", explicó Barral sobre el fichaje del rumano, la ultima incorporación del Deportivo para el curso que encara ya su tercera jornada.