Luisinho lamentó al final del encuentro contra el Espanyol el mal inicio de los deportivistas, que terminó costándoles un gol y les puso el partido cuesta arriba. "Fue un partido al que no entramos bien. Sufrimos dos goles muy temprano, pero el equipo intentó controlar siempre el balón", resumió el lateral portugués. "En el segundo tiempo entramos mejor, hicimos el 2-1 y cuando estábamos mejor sufrimos un penalti y ahí estuvo la clave del partido", añadió.

"Es difícil perder, eso está claro, tenemos que ser más constantes, tanto en casa como fuera. Fuera nos está costando mucho más, pero hay que estar unidos y no bajar la cabeza y pensar ya en el próximo partido", indicó Luisinho sobre el compromiso contra el Getafe del sábado en Riazor.