El entrenador del Deportivo, Pepe Mel, ha destacado del Girona, al que se medirá este lunes en el estadio de Riazor, que tiene "una personalidad propia", la que le ha aportado su técnico, Pablo Machín.

"El Girona tiene una personalidad propia. Me enfrenté a este mismo equipo y entrenador antes, juega con tres centrales, dos carriles largos y tres mediocentros. No es ofensivo ni defensivo, depende de las circunstancias. Tiene virtudes claras como el balón parado y son cosas que tenemos que mirar y hemos trabajado", analizó en rueda de prensa.

Mel, que superó su primer ultimátum en el Deportivo en la anterior jornada como local, ante el Getafe (2-1), y posteriormente consolidó el cargo con el empate ante el Eibar (0-0), admitió que "la vida del entrenador" depende del "día a día".

"Siempre estás pensando en el rival, igual que aquel día (1 de octubre) solo pensábamos en el Getafe. Salió bien, en Eibar competimos bien y ahora solo pensamos en ganarle al Girona, no pensamos más allá. Al final la vida del entrenador es el día a día", comentó.

Por delante, el conjunto coruñés tiene el reto de enlazar tres victorias seguidas en casa, algo que no consigue en Primera División desde hace siete años.

"¿Para qué lo dices? No lo digas", respondió al periodista que le formuló la cuestión antes de añadir que "el equipo va a más y está cogiendo poso".

"Mañana es la jornada nueve, un buen momento para que el equipo vaya aumentando sus prestaciones ante un buen rival, con sus cosas, que logró un meritorio ascenso y que mantiene las pautas que tenía en Segunda", comentó Mel.

El técnico aseguró que el equipo no debe pensar en el salto que dará si consigue la victoria, ya que escaparía de la zona baja porque, además, el Girona es un rival directo.

"Sinceramente no hemos hablado de eso. Es una equivocación. No podemos pensar en qué pasa si ganamos, como tampoco ante el Getafe pensábamos qué pasaba si perdíamos porque entre otras cosas estaba claro", sostuvo.

El técnico admitió que es "complicado" gestionar un grupo que tiene las 25 fichas de la plantilla profesional cubiertas y en el que, además, ahora mismo está jugando como titular el portero del filial, Francis Uzoho.

"Va a ser tremendo seleccionar a 18 jugadores cuando estén todos disponibles, pero es lo que queremos todos. Como hablábamos en verano, tener más de 22 fichas profesionales siempre es un problema y no solo ha sucedido eso, sino que encima tenemos cuatro porteros para luchar por el puesto, pero eso va a levantar el nivel seguro", señaló.

A Francis, que debutó en Eibar, le ve "francamente bien" y por eso arriesgó con darle la titularidad en Ipurua.

"Era un riesgo que sabíamos que iba a ser compensado porque tenemos mucha confianza en él. Tiene futuro si trabaja bien y hace las cosas con seriedad. Tiene toda la confianza de los compañeros y del cuerpo técnico y esperemos que mañana demuestre que está capacitado de sobra para defender la portería del Deportivo", declaró.

Añadió que Francis, además de su potencial, ha tenido "la suerte de haber encontrado un entrenador al que no le importa la edad y jugársela".

Sobre el argentino Fede Cartabia, explicó que "no acaba de curarse" de las molestias que arrastra de los anteriores partidos, aunque le ve en condiciones de poder jugar ante el Eibar.

Otro nombre propio que tocó en su comparecencia fue el del turco Emre Çolak, del que dijo que "ahora está haciendo" lo que le pide "que haga".

A sus jugadores de ataque les reclamó "precisión" en el último pase porque el equipo que tiene esa "virtud" hace goles.

Mel también defendió la posición del internacional uruguayo Fede Valverde en la banda izquierda, una zona del campo que no solía ocupar antes de llegar al Deportivo cedido por el Real Madrid.

"Desde que ocupa esa posición tenemos más balón que el rival, más pases, más control y mejores resultados. Tiene libertad total con la pelota y sólo la obligación de defender en una zona", comentó.