Después de la marcha de Pepe Mel, tres partidos dirigidos por Cristóbal (dos en Liga y uno en Copa) aún no son suficientes para sacar conclusiones definitivas, pero las sensaciones son positivas. En estos partidos el Deportivo jugó más ordenado y equilibrado, con más amplitud y con más intensidad hasta el minuto 90. Realizó ayudas permanentes, no tuvo dudas a la hora de atacar o defender y ejecutó buenos cambios de ritmo. En pocas palabras, funcionó más como equipo y, lo más importante, cada jugador jugó en su sitio, que es donde a cada uno se le puede sacar más rendimiento tanto a nivel individual como colectivo, como es el caso de Fede Valverde.

Del partido de Copa todavía no me explico cómo Las Palmas pudo marcar cuatro goles, y cómo el Deportivo estuvo tan fallón en el remate jugando con un hombre menos. Del partido de Liga en Gran Canaria destaco el segundo tiempo del equipo, la perfecta jugada colectiva que supuso el primer gol y los cambios realizados por Cristóbal para conservar un resultado positivo fuera de casa. Frente al Atlético de Madrid, el Deportivo presentó un sistema 4-1-4-1 que permitió ocupar bien el campo y, sobre todo, combatir y neutralizar el juego del rival. Me gustó la alternancia de posiciones entre Fede Valverde y Borges. Todo el equipo estuvo bien excepto Pantilimon, con su estatua en la falta que acabó en gol. Y a pesar de haber perdido un punto -el empate hubiera sido el resultado justo frente a todo un Atlético-, la imagen dada por el equipo fue premiada por la afición durante y al final del partido. Eso lo dice todo.

Personalmente, cada día me gusta más Fede Valverde, y por muchas razones. Por su calidad y entrega, por la cantidad de ayudas que proporciona a sus compañeros, porque piensa en el equipo, porque es solidario y por su gran desplazamiento de balón y enorme capacidad de disparo a media distancia; aunque a veces se precipita, lo que quizá sea a causa de su juventud (¡y pensar que al principio no fue alineado y cuando lo fue se le situó en la banda!).

En el plano individual, no entiendo que Lucas siga sacando las faltas y saques de esquina. Es un jugador que tiene buen disparo desde media distancia y por eso creo que se le puede aprovechar mejor en la zona de rechace. Bakkali debe tirar más a gol cuando encara, aunque sea un poco escorado, y no hacer tantos recortes y amagos hacia el centro porque cada vez tendrá más oposición. Juanfran tiene que centrarse más en defender, sobre todo en el juego aéreo. Sigo opinando que Lucas y Andone pueden jugar juntos. Andone por el centro y la derecha, y Lucas escorado a la izquierda y algo retrasado, ya que tiene velocidad, llegada y buen disparo.

Con respecto a los porteros, creo que tres porteros profesionales en el Deportivo son muchos, y supone mucho gasto. Mi teoría es que el equipo debe tener dos buenos porteros y el tercero tendría que ser el meta titular del Fabril.

Para concluir, espero y deseo que la buena imagen dada en los últimos dos partidos de Liga continúe y que no sea un espejismo.