El Deportivo está en la media de puntos, una vez disputadas las primeras quince jornadas de la competición de Primera en la última década, en la que acumula seis temporadas en la máxima categoría y dos en Segunda División. Solo en las campañas 2010-11 y 2015-16 mejoraba la puntuación actual, mientras que en solo una (2012-13) ocupaba una posición inferior a la de la actualidad. De todas formas, la previsión es que al final del curso la salvación no esté tan barata como en ejercicios anteriores.

El equipo coruñés marca ahora la salvación con 15 puntos en otras tantas jornadas y por abajo solo tiene a tres contrincantes, el Alavés (a tres puntos), el Málaga (a cuatro) y el las Palmas (a cinco). Faltan cuatro jornadas para llegar al final de la primera vuelta y el calendario que le aguarda resulta mucho más que complicado -Barcelona, Celta, Villarreal y Valencia-, para pensar que puedan mantener la media de un punto por encuentro en el ecuador de la competición.

Al inicio de la década el Deportivo sufrió el descenso con la puntuación más alta de cuantos equipos perdieron la categoría. En aquel 2010-11 no le bastaron los 43 puntos que había sumado -fue la temporada del recordado Levante-Zaragoza-. En los tres siguientes cursos que fue capaz de alcanzar la permanencia necesitó bastantes menos, desde los 35 puntos del curso 14-15 -que no le bastaron en 2012-13-, a los 36 de la temporada pasada. Cierto es que en medio, temporada 2015-16, logró 42 puntos y eran necesarios 39 para continuar en la elite. Este año parece que los números apuntan así de alto.

La decimoséptima plaza actual es la segunda peor en la década a estas alturas del torneo, pues solo en 2011-12 ocupaba un puesto peor, el último con 11 puntos. Fue la campaña de la destitución de Oltra y la posterior llegada de Domingos y Fernando Vázquez. La ilusión y los resultados que ofreció y obtuvo el de Castrofeito no habían resultado suficientes para lograr una permanencia que alcanzarían los coruñeses si hubiesen vencido a la Real Sociedad en Riazor en la última jornada, pero los realistas en aquel partido se jugaban la clasificación para la Liga de Campeones. Y la conquistaron.

Todos los demás años el equipo blanquiazul estaba mejor colocado cumplida la decimoquinta jornada. Desde la decimoprimera plaza de la campaña 2010-11 -la del primer descenso con 43 puntos-, hasta el sexto puesto, y 23 puntos, que ostentaba el equipo en 2015-16, con Víctor Sánchez en el banquillo. Sin embargo, ese año de aparente tranquilidad se volvió a convertir en un sufrimiento que se calmó con el triunfo en la visita al Villarreal en la penúltima jornada. Ahí certificó la permanencia; en el mismo escenario que lo hizo la pasada temporada con un empate sin goles. Villarreal y Barcelona, el rival del próximo domingo, son los equipos ante los que el Deportivo firmó una continuidad agónica en la elite. A ambos visitarán en las siguientes salidas, con el Celta por medio en Riazor, pero a diferencia de los cursos anteriores todavía quedará toda una segunda vuelta por delante.

La media de puntos da a estas alturas para alcanzar la meta, pero el décimo puesto está lejos. No numéricamente, porque se encuentra a tres puntos, pero hay numerosos adversarios por el medio y otros, demasiado peligrosos, esperando en el camino: Barcelona, Celta, Villarreal y Valencia para cerrar la primera parte del campeonato. Para mantener la media, el Deportivo necesitará sumar cuatro puntos.