El Dépor no para de llevarse decepciones cuando juega y alegrías cuando pega la oreja al transistor para seguir en la distancia a sus rivales por la permanencia. Las cábalas blanquiazules no contaban con el empate del Las Palmas ante el Barça (1-1), pero la derrota del Levante en Vitoria permite al equipo coruñés seguir a menos de un partido de la salvación (tiene dos puntos menos que los rivales que le preceden) y le da aire de cara a la final de mañana ante el Eibar en Riazor. El gol del alavesista Laguardia sobre la hora en un partido que amaneció torcido para los granotas por la roja a Chema mandó a la lona al grupo de Muñiz, que sale trasquilado de un encuentro que puede hacer aún más mella en su ya frágil moral. A pesar de tener que disputar una hora con un hombre menos por la expulsión de su central, el Levante pudo de entrada librarse del 1-0 por el fallo desde los once metros de Manu García y supo ensuciar el encuentro y trabarlo para mostrarse firme en la resistencia e incluso atrevido en ataque con un balón al palo de Ivi en un lanzamiento de larga distancia. Todo se vino abajo en ese falta lateral que el central del equipo vasco envió de cabeza a la red. Un tanto celebrado en Vitoria y también en A Coruña.

No todos fueron buenas noticias para el Deportivo ayer en el día que cerraba la jornada entre semana de Primera División. La visita del Barcelona al Estadio de Gran Canaria invitaba a pensar en una jornada a cero para el conjunto de Paco Jémez, pero los amarillos son los únicos de la zona caliente de la tabla que están en una dinámica positiva y no se vinieron abajo cuando Messi hizo el 0-1 en una falta inalcanzable para Chichizola. Sufrieron y siguieron en el partido hasta que el colegiado del encuentro señaló una polémica pena máxima en contra del Barcelona, la primera en aproximadamente dos temporadas. A diferencia de Lucas, Calleri no erró y el equipo insular neutralizó las ofensivas culés hasta hacer definitiva la igualada.

Los resultados de la jornada han hecho aún más patente que la salvación es una lucha de cuatro. Los triunfos de Alavés y Espanyol y el empate de la Real Sociedad dejan al Leganés quinto por la cola, pero con diez puntos de ventaja sobre la zona roja. Una distancia que se antoja casi insalvable a tenor del ritmo de Levante, Las Palmas. Dépor y Málaga. La lucha continúa.