Mucho tiempo llevaba el Deportivo esperando los goles de sus delanteros. Ayer mojaron los dos arietes que formaron desde el inicio, Lucas Pérez y Adrián López, que destaparon su olfato anotador para colaborar de forma decisiva al triunfo coruñés, el primero tras quince jornadas sin ganar. El coruñés rompió una sequía que duraba casi cinco meses. Una vuelta entera llevaba sin marcar, desde la visita a La Rosaleda, el 19 de noviembre del año pasado. Ayer, de nuevo frente al Málaga, celebró una diana, la que abrió el marcador al transformar un penalti que él mismo provocó. Adrián despertó en la segunda parte para rubricar un doblete con el que se reencontró con el gol tras casi tres meses sin ver puerta, desde el pasado 27 de enero, cuando firmó el primero de los dos tantos coruñeses en el empate en Riazor ante el Levante (2-2). En ese encuentro ante el conjunto granota también festejó su último tanto Florin Andone, quien ayer fue suplente y solo disputó los últimos cinco minutos.

Además de abrir el marcador con su lanzamiento desde los once metros, Lucas dispuso de varias ocasiones más para anotar, la más clara un remate, tras un servicio de Albentosa, que Roberto abortó con una gran parada. El coruñés, muy emocionado, se disculpó ante la grada tras marcar por no estar rindiendo al nivel que todo el mundo esperaba cuando se confirmó su retorno. Lo celebró con alegría y rabia, igual que Adrián los suyos.

También el asturiano rondó el gol antes de inaugurar su cuenta particular. Por ejemplo, cuando Lucas conectó con él filtrando un pase a la espalda de la defensa visitante. El asturiano encaró la meta del Málaga pero disparó flojo, a las manos del portero. El asturiano fue de menos a más y, tras una primera parte gris, destacó en la segunda por su capacidad anotadora y también por su movilidad para desmarcarse y abrir espacios a sus compañeros.

Su doblete de anoche permite al Deportivo sumar tres puntos con los que se sitúa a cinco del Levante, a falta del resultado de los granotas el domingo en su enfrentamiento directo contra la Unión Deportiva Las Palmas. Por lo menos, el equipo coruñés mantiene la esperanza de seguir agarrándose a Primera División. También gracias a la aportación de Borja Valle, el otro futbolista de la plantilla capacitado para formar en la punta de ataque. Estuvo brillante en la acción que dio lugar al 3-2 definitivo y demostró que está con muchas ganas de aprovechar al máximo los minutos que le brinda Seedorf.