La próxima edición del Trofeo Teresa Herrera se disputará en el estadio de Riazor, pero no servirá de estreno del Deportivo ante su público, ya que se jugará con el campeonato de Segunda División ya iniciado. Las obras previstas en la cubierta del estadio obligarán a aplazar la celebración del decano de los torneos veraniegos, que suele jugarse a principios de agosto.

El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, admitió ayer que el torneo no podrá disputarse "en las fechas habituales porque no podría ser en Riazor y debe celebrarse" en ese escenario. El primer edil aseguró a los periodistas en la firma del convenio con la Diputación de A Coruña sobre la reforma del estadio municipal que habrá que "ver en qué fecha" se juega el Teresa Herrera, si se hace "con el inicio de la Liga o en algún parón" del campeonato, aunque en Segunda División, a la que ha descendido el Deportivo, estos paréntesis no se producen.

El Ayuntamiento invertirá en las cubiertas de Riazor algo más de siete millones de euros y de esa cantidad la Diputación asumirá un millón, el 14,3 por ciento del presupuesto total. El presidente del Gobierno provincial, Valentín González Formoso, y Xulio Ferreiro firmaron ayer el convenio para cofinanciar los trabajos.