Ni Sidnei ni tampoco Guilherme participaron en el amistoso que enfrentó ayer al Deportivo y al Valladolid en Bembibre (1-1). Por la mañana trabajaron en Abegondo con el grupo, pero no entraron en la convocatoria para el partido debido a su situación, ambos en la rampa de salida para abandonar el club. Mientras sus compañeros afinaban su puesta a punto ante el único rival de Primera marcado en el calendario veraniego, el central brasileño aterrizaba en Sevilla para cerrar su incorporación al Betis, por cuyo traspaso el conjunto verdiblanco abonará al Dépor una cantidad que podría rondar los seis millones de euros. Más lejana, de momento, está la salida de su compatriota Guilherme. Tiene propuestas y el objetivo del Deportivo es venderlo, no cederlo. Entre las ofertas que maneja desde Brasil apuntan al firme interés del São Paulo en hacerse con sus servicios. En cualquier caso, su marcha todavía está muy lejos de cerrarse. Los que siguen a las órdenes de Natxo son Fede Cartabia y Celso Borges. El argentino firmó ayer un gran gol de vaselina, el 1-1 definitivo (m.88), al aprovechar un perfecto balón al espacio que le sirvió el costarricense, entonado en sus primeros minutos con el Dépor en esta pretemporada.

El director deportivo, Carmelo del Pozo, tiene la esperanza de que no solo el argentino se quede, sino también el costarricense, para que ambos puedan marcar diferencias en Segunda. No lo hará Sidnei, en Sevilla para enrolarse en el Betis. No fue la primera vez que hizo las maletas este verano con la intención de no volver. Hace dos semanas Deportivo y Krasnodar llegaron a anunciar un acuerdo para el traspaso del defensa. Viajó a Austria con permiso del club para unirse a la concentración del equipo ruso, pero la operación finalmente se truncó por las diferencias entre los agentes del jugador y los dirigentes del Krasnodar. El central regresó a A Coruña y se reincorporó a los entrenamientos del Deportivo, el último ayer por la mañana. Por la tarde tomó un avión, también con la autorización del club coruñés, y aterrizó en el aeropuerto San Pablo de Sevilla para sellar definitivamente su pase al Betis.

El adiós de Sidnei desencadenará el fichaje de otro central por el Dépor. También llegará un refuerzo para el centro del campo si se acaba consumando la más que probable salida de Guilherme. Son dos de los "tres o cuatro cambios" previstos en las cuentas de Carmelo. Tyton también acabará saliendo porque no entra en los planes del club y la portería ya está cerrada con Ortolá, Dani Giménez y Francis. El nigeriano tendrá que aceptar el rol de jugar en Segunda B con el Fabril, o bien buscar una salida, temporal o definitiva. Otros tres casos con incertidumbre son los de Borja Valle, Michael Krohn-Dehli y Raúl Albentosa. A día de hoy son jugadores de la plantilla blanquiazul y todos participaron en el amistoso de ayer frente al Valladolid. El atacante volvió a formar pareja en la delantera junto a Quique González. El central valenciano también participó desde el inicio en el eje de la zaga junto a Eneko Bóveda, de nuevo en la posición de central. Krohn-Dehli entró a veinte minutos del final, al mismo tiempo que Celso Borges y Fede Cartabia, los protagonistas en la bella acción del gol del empate.