Es habitual que durante los partidillos de entrenamiento de todos los equipos algún jugador acabe por los suelos, a consecuencia de la disputa del balón, y el juego continúe sin necesidad de detenerse salvo que sea por causa de fuerza mayor. Djurdjevic cayó ayer tras un pisotón fortuito en una acción con Cofie, y todo el mundo se paró de repente. En unos segundos, el serbio, que se dolía en el suelo agarrado a su tobillo derecho, se vio rodeado de compañeros y técnicos para interesarse por su estado. Todo quedó en un susto.

El Sporting mima a Djurdjevic, el único futbolista por el que pagó traspaso y la guinda del capítulo de fichajes tras desembolsar 2,5 millones de euros al Olympiakos. El delantero serbio tardó poco en recuperarse del golpe que se produjo en una acción en la que Cofie intentaba quitarle el balón. El centrocampista ghanés se disculpó reiteradamente.