Domingos Duarte (Cascais, 1995) aterrizó en el Deportivo como una de las más firmes promesas de la prolífica cantera del Sporting portugués. No tardó mucho en convencer a Natxo González de sus cualidades y de afianzarse en el equipo titular al mismo tiempo que se adaptaba a una nueva ciudad y a una realidad futbolística muy diferente a la que había conocido hasta la fecha.

- ¿Cómo ha ido su adaptación estas semanas?

-Es la primera vez que salgo de Portugal y está siendo una experiencia nueva, pero me estoy adaptando bien a todo; especialmente al fútbol español, que es un poco diferente.

- ¿Cuál es la mayor diferencia que se ha encontrado?

-Casi todos los equipos juegan desde atrás y para mí eso nuevo. Cuando estaba en el Chaves con Luís Castro el año pasado ya lo hacía, pero venir aquí es un paso más porque en el fútbol español el central tiene la obligación de jugar el balón. En España se da mucha importancia a los centrales, eso te da mucha responsabilidad también.

- ¿Cómo lo lleva?

-Creo que se me está dando bien, pero siempre se puede mejorar con el trabajo del día a día.

- ¿En qué se centra en mejorar?

-A mí me gusta mucho tener el balón. Cuando eres niño y empiezas a jugar quieres hacer cosas como Messi, Cristiano..., pero luego te das cuenta que un central no puede salir desde atrás fintando jugadores. Puedes hacer otras cosas, como pases entrelíneas, y es lo que intento.

- ¿Qué es lo que más le ha sorprendido?

-Aquí todos los equipos son muy competitivos, puedes ganar contra el primero y perder contra el último. El ejemplo es lo que pasó en Alcorcón, que en teoría no es uno de los equipos para estar arriba, pero jugamos en su campo y fue muy, muy difícil. Son equipos que defienden muy bien, pero en general todos los equipos aquí en España son más agresivos, no hay ninguno que se quede los 90 minutos atrás.

- ¿Lo que ha encontrado es otra cultura futbolística?

-Sin duda. Y me gusta, lo estoy disfrutando.

- ¿Fue ese el principal motivo para venir, a pesar de llegar a un equipo en Segunda División?

-Sí, porque todo el mundo sabe la importancia que tiene el Dépor en el fútbol español y también es un reto trabajar para devolver al equipo donde se merece.

- ¿Es consciente del reto que supone también?

-Sabemos que tenemos que estar arriba, pero van cinco jornadas, todavía queda mucho. Son 42 partidos, es muy largo. Esta es una liga muy competitiva, en la que hay muchos equipos que se manejan muy bien, especialmente en casa, como el Alcorcón, el Oviedo... Ya sabes a lo que vas cuanto te toca ir allí y tienes que hacerlo muy bien para sacar los tres puntos fuera, que en esta Liga es muy, muy difícil.

- Habla de la Segunda División como si la conociese de toda la vida...

-Sabía un poco antes de venir porque tengo un amigo que juega en Reus (Ricardo Vaz). Cuando estaba en Segunda B veía algunos partidos y después cuando ascendió empecé a ver algunos más. Ahora voy conociendo un poco más la categoría y me gusta mucho.

- ¿Por qué le parece tan atractiva?

-Es que puedes jugar con el último y perder y jugar con el primero y ganar. No hay mucha diferencia entre los equipos, aunque pueda haber diferentes formas de jugar. Es muy competitiva y casi nunca hay goleadas. El Málaga está ahora en una buena racha, pero también la podemos tener nosotros después. Todos los campeonatos tienen fases y siempre se pasa por unas buenas y otras malas, pero al final el que está arriba es el que es más regular.

- Se está hablando mucho del rombo que usa el equipo, ¿cómo lo ve?

-Hay más opciones por dentro y tienes mucha gente en esa zona para atraer al rival y después jugar hacia la banda. A mí me gusta y cuando he jugado en Portugal contra equipos que jugaban así era muy difícil defenderlos. Creo que nos hemos acostumbrado bien, pero todavía faltan cosas por mejorar. Cuando nos adaptemos los unos a los otros va a fluir más fácil.

- ¿Qué le pide Natxo?

-Nos pide a todos los centrales que tengamos el balón y que consigamos darle una salida limpia para que haya continuidad en el juego, también darle pausa cuando sea necesario y defender bien, claro. Para mí lo primero es defender, porque soy defensa, después viene jugar con el balón. Aquí en España defender y manejar el balón tienen la misma importancia, pero me gusta tener esa responsabilidad.

- ¿Qué le falta a este Deportivo que propone el técnico?

-Aún no estamos adaptados por completo unos a otros. Esto es como un proceso, tenemos que ir de menos a más para ir acercándonos a la zona de arriba. También hemos tenido algunas lesiones que no nos han beneficiado, jugadores como Quique o Borja que le dan mucho al equipo

- Nada más llegar dijo que no era "un niño" y ha empezado de titular indiscutible, ¿sentía que tenía algo que demostrar?

-No tengo que demostrar a nadie lo que hago, porque lo sé y tengo confianza en mí. Si a la gente le gusta lo que hago, mejor, pero estoy tranquilo. Tengo 23 años y ya jugué casi 60 partidos en la Primera División portuguesa, ahora estoy jugando también... Pero no me gusta hablar de mí.

- ¿Temía que por su edad se le minusvalorase?

-No, no. No tiene nada que ver una cosa con la otra. Mbappé, por ejemplo, tiene 19 años y es uno de los cinco o seis mejores jugadores del mundo; no tiene que ver la edad con la calidad. Y con eso no quiero decir que no pueda mejorar. Igual que ahora tengo 23 años, cuando tenga 33 también tendré cosas que aprender. Puede que sea un niño por una parte, pero por otra no.