La satisfacción del triunfo aquel miércoles 23 de mayo de 2012, que supuso el trampolín para el ascenso a Primera División, con el gol de Xisco en el minuto 94, permanece todavía en la retina del seguidor blanquiazul. Una victoria decisiva que permitió al cuadro coruñés mantenerse con ventaja frente al Celta y al Valladolid en la clasificación. Tanto, que en la jornada siguiente el Deportivo logró el ascenso matemático. Sobró ya el último partido contra el Villarreal B en El Madrigal. Pero esa victoria, la de 2012, fue la única que el Deportivo consiguió en el Nou Estadi de Tarragona en sus cinco visitas como equipo de Segunda División.

Antes, los blanquiazules habían sucumbido en sus cuatro anteriores visitas. Incluso en los partidos de Primera los coruñeses tenían problemas en este campo. En la máxima categoría solo se enfrentaron tres veces a los tarraconenses con un triunfo, un empate y una derrota. La igualada había sido en la última visita en la elite; la victoria, en la primera, allá por el curso 48-49 (del siglo pasado), temporada, el Deportivo finalizó en décima posición, justo por detrás de los granas, en una competición con catorce equipos. Un punto más habían sumado los catalanes, a pesar de haber salido goleados en los dos partidos que disputaron contra los blanquiazules (6-2, en Riazor) y 1-4 en el campo del Tarragona).

El reencuentro entre ambos equipos se vuelve a producir cinco años después del trascendental triunfo con el gol de Xisco, que permitió a los coruñeses retornar a Primera División en el primer año en Segunda -en el segundo descenso consecutivo de los deportivistas el Tarragona seguía en Segunda B, pues ya estaba descendido cuando recibió la visita blanquiazul en aquel partido de 2011-12-.

Ahora, el equipo blanquiazul vuelve a partir como favorito frente a un adversario que solo lleva un triunfo (logrado en su campo ante Osasuna, 1-0), y que contará con numerosas bajas para este partido, el central Josua Mejías, el centrocampista Ramiro Guerra, el delantero Manu del Moral, y tiene las dudas de Javi Márquez y Sebas Coris, ambos con molestias. Por eso, José Antonio Gordillo, técnico del Nàstic dijo ayer que se tiene que ver "un Nàstic al 100% para poder ganar", al cuadro coruñés.