El fútbol modesto coruñés está de luto tras el fallecimiento ayer de Amancio Peláez Álvarez (Luarca, Asturias, 1945) delegado y directivo el Deportivo Ciudad en los últimos cuarenta años. Amancio se incorporó al club de la Ciudad Vieja en mayo de 1988 y desde entonces estuvo siempre al servicio del histórico club coruñés, pero al mismo tiempo siempre ofreció su ayuda a todos los adversarios, a los que consideraba amigos y compañeros en la travesía que los jóvenes futbolistas iniciaban en los campos de fútbol de la ciudad. El cuerpo de Amancio fue trasladado ayer a la funeraria de la plaza de la Palloza y este mediodía (12.00 horas) será incinerado en el cementerio de Feáns.

Amancio, socio número 104 del Deportivo Ciudad, destacó por su dedicación al club rojillo, pero también por su excelsa colaboración con los más pequeños aunque fuesen adversarios. Ni una mala palabra y muchas acciones buenas. Tanto es así que la inmensa mayoría de los clubes modestos de A Coruña transmitieron sus condolencias a la familia y así como al propio Deportivo Ciudad. Su comportamiento con todos los integrantes del fútbol coruñés le permitió recibir en 2016 el premio de la Federación Galega de Fútbol, así como la insignia de oro de la AFAC (Asociación de Fútbol Aficionado de A Coruña).