El Deportivo inaugurará esta tarde el 2019 con un partido ante el Lugo en Riazor marcado por la forma en la que el equipo despidió el año recién finalizado. El tropiezo contra el Cádiz en el Ramón de Carranza fue el colofón a un 2018 que se cerró de manera irregular. Diciembre fue el mes más gris para el conjunto de Natxo González, frenado en la clasificación debido a un botín de puntos por debajo de las expectativas. El juego se resintió y con él unos resultados que deberá empezar a corregir a partir de hoy si quiere aprovechar también la oportunidad que le han brindado los resultados de la jornada.

El empate entre Granada y Albacete le permitiría al Deportivo acercarse de nuevo a los puestos de ascenso directo en el caso de imponerse a un Lugo que llega en su momento más dulce de la temporada. A pesar de que su situación en la tabla continúa siendo precaria, el conjunto de Alberto Monteagudo comparecerá en Riazor después de tres partidos consecutivos sin perder y animado por las dudas que rodean a los blanquiazules.

Natxo González regresará a su esquema tradicional después de probar con una defensa de cinco ante el Cádiz. El técnico recuperará el rombo en el centro del campo para tratar de regresar también a la versión más convincente del equipo, aunque en el once titular se mantienen algunas incógnitas. Caballo y Saúl pugnarán una vez más por el lateral izquierdo, mientras que en el centro del campo el único que parece seguro es Edu Expósito.

En las dos vacantes del centro del campo se presentan varias alternativas. Vicente Gómez podría dejar su sitio a Krohn-Dehli por el mal momento de forma que atraviesa el canario, mientras que su discreto partido en Cádiz pasaría factura a Álex Bergantiños en favor de Mosquera. Por delante la opción preferida de Natxo sería la de Carles Gil debido a las precauciones que todavía rodean a Cartabia por su estado físico.

En la delantera hay menos dudas. Aunque el entrenador deportivista recupera a Carlos Fernández, mantendrá la apuesta por Quique González y Borja Valle. Especialmente importante será el compromiso para el primero debido a sus números en los últimos compromisos. Aunque se mantiene como el máximo goleador del equipo, solo ha conseguido marcar un tanto en los últimos seis partidos, lo que le coloca en una posición delicada por el empuje de Valle y la recuperación de un Carlos al que el equipo ha echado en falta.

El delantero es la principal referencia ofensiva del Lugo y la principal preocupación esta tarde para la defensa blanquiazul. Este curso suma cinco goles.