Unas horas antes de recibir al Tenerife en Riazor el sábado, Natxo González no sabía a ciencia cierta si podría contar con Fede Cartabia. Unas molestias musculares mantenían en el alambre al argentino, que finalmente entró en la convocatoria y jugó veinte minutos en la segunda parte. Las precauciones en el caso del centrocampista han sido la norma de la temporada, aunque no han sido exclusivas de él porque los percances físicos se han reproducido en las últimas semanas en el equipo hasta condicionar las alineaciones del técnico.

A los problemas de Cartabia, que ayer en la vuelta al trabajo de la plantilla se ejercitó con normalidad después de perderse la sesión del domingo por un golpe en un pie, se han sumado los de Carlos Fernández, sin continuidad en el once desde que a comienzos del mes de diciembre se lesionara ante el Rayo Majadahonda. Reapareció ante el Lugo, se perdió el partido en Mallorca, forzó para estar contra el Albacete y se rompió en Gijón, lo que le mantendrá por un tiempo sin especificar fuera de las convocatorias.

Los de Cartabia y Carlos Fernández han sido dos nombres habituales en el parte de bajas, pero en el tramo más reciente de la temporada hay que incluir también a Pedro Sánchez, todavía al margen del grupo por un problema muscular que arrastra desde el mes de diciembre. El centrocampista apenas ha disputado ocho partidos esta temporada y, tras la salida de Carles Gil, es junto a Cartabia el único jugador de la plantilla que puede desempeñarse como mediapunta de manera natural. Natxo no quiso aventurar la semana pasada una posible fecha de regreso para el alicantino, pero la idea era que pudiera comenzar a entrenarse con el resto de sus compañeros a partir de esta semana.

Los problemas para Natxo en las últimas jornadas afectaron también a un centro del campo en el que Krohn-Dehli se perdió dos partidos por un problema muscular. Ya a comienzos de temporada el danés permaneció parado por una lesión cuando se había convertido en una de las opciones preferidas del técnico en esa posición. El nórdico participó desde el banquillo en el encuentro ante el Tenerife, pero ayer no pudo entrenar y se sumó a la incógnita de Vicente Gómez.

El canario se ejercitó tampoco ayer con el grupo debido a unas "molestias en un pie", de acuerdo a la información facilitada por el club. Ya se perdió la sesión del domingo después de no poder disputar el partido del sábado por acumulación de amonestaciones. La única buena noticia en este apartado para Natxo ha sido la recuperación de Saúl García, que se ha perdido los dos últimos compromisos del equipo.