El Deportivo regresará el viernes a Riazor, escenario ahora de sus desvelos después de encadenar cuatro partidos seguidos sin una victoria (tres empates y una derrota). Lo hará rodeado de dudas más allá de las que despiertan los resultados recientes porque a la inercia negativa del equipo como local se suman las incógnitas derivadas del once y del planteamiento de Natxo González. El técnico recibirá al Almería con bajas obligadas y tras un revés reciente que le podría llevar a dar un golpe de timón para tratar de sortear la crisis en la que se encuentra sumido el conjunto blanquiazul.

Giro en la propuesta. La derrota ante la Unión Deportiva Las Palmas de hace dos semanas, sumada a los tres empates consecutivos previos en Riazor, han evidenciado los síntomas de fatiga del juego deportivista ante sus aficionados. El equipo se ha vuelto perezoso, no encuentra soluciones a los problemas que evidencia para crear fútbol y los arreones de sus jugadores más inspirados ya no le permiten resolver sus compromisos. Natxo ha buscado soluciones explorando alternativas en los esquemas y ante Las Palmas empleó un doble pivote formado por Mosquera y Vicente, con Edu Expósito en la mediapunta. Contra el Almería este viernes podría darle continuidad a la idea, aunque sin la presencia del exfabrilista.

Un recambio para Expósito. La baja por sanción del centrocampista representa un contratiempo importante para Natxo. El ex del Fabril es el jugador más en forma de la plantilla y de los pocos que en los últimos partidos ha mostrado un rendimiento individual por encima del colectivo. Está por ver de qué modo recompone su esquema el técnico para cubrir su hueco. Entre las alternativas se encuentra colocar a Pedro Sánchez como mediapunta para mantener el dibujo de la última jornada (doble pivote) o bien regresar a los tres centrocampistas y escoger entre Didier Moreno o Álex como acompañantes de Mosquera y Vicente.

Lagunas en el ataque. Natxo también deberá dar respuesta a las dudas que se plantean en la parcela ofensiva. Ya no se trata solamente de unas cifras menguadas en las últimas semanas, sino de los problemas que arrastran varios jugadores. Ayer Natxo solo pudo contar en el entrenamiento con Christian Santos debido a la baja de Carlos Fernández y a las precauciones con las que está trabajando estos días Quique González. La reaparición del primero parece descartada para evitar correr riesgos y que se produzca una nueva recaída de la lesión muscular que padece.

Urgencias en la clasificación. El Deportivo recibirá también al Almería con la presión añadida de la tabla. El ascenso directo está a cinco puntos y el séptimo clasificado acecha ya a los blanquiazules a cuatro puntos de distancia. "No creo que Osasuna esté ya ascendido. Nosotros vamos a pelear e intentar llegar a las últimas cinco jornadas con el objetivo. Vamos a intentar ser cautos porque no es fácil ganar tramos de varios partidos seguidos", manifestó ayer Pedro Sánchez sobre la situación deportivista en la clasificación.