Empieza una nueva etapa, con lo que eso siempre supone en cuanto a reactivación de los futbolistas, especialmente de aquellos que hasta ahora venían jugando un papel secundario con Natxo en el banquillo. Son los casos, por ejemplo, de Saúl García „Martí ya lo dirigió en el Tenerife„ o Pedro Mosquera, a quienes el vitoriano volvió a dejar fuera de la lista para el encuentro del pasado sábado frente al Rayo Majadahonda; o Christian Santos, otro de los que apenas estaban entrando en sus planes.

Todos parten de cero. Todos alerta para tratar de convencer a José Luis Martí, que tendrá que hacer cinco descartes en su primera convocatoria como técnico del Deportivo, la que hará pública el viernes para viajar a Pamplona. Solo tiene al margen a los lesionados Michael Krohn-Dehli y Fede Cartabia. Los otros 23, más el portero del filial Pedro López, estuvieron ayer a sus órdenes y a las del nuevo segundo entrenador, Fabián Rivero, incluidos los delanteros Quique González y Carlos Fernández, que se retiraron a los vestuarios antes que el resto por prevención. Tras la sesión, al igual que en la anterior etapa, jugadores y técnicos comieron juntos en las instalaciones de la ciudad deportiva.