Quique González subrayó ayer que, por encima de cualquier otra cosa, mañana contra Osasuna tiene que verse a un Deportivo ambicioso y decidido a lograr los tres puntos. "Lo que se tiene que ver es un equipo que va a por el partido en El Sadar. El Deportivo en lo único que piensa es en ganar", respondió el delantero ayer por la mañana cuando se le cuestionó sobre si en Pamplona podrá empezar a notarse la influencia de José Luis Martí en el equipo.
Quique desveló que, en sus primeros días al mando, el nuevo técnico blanquiazul se ha centrado en recuperar la confianza de los jugadores después de varias semanas en las que los resultados negativos hicieron mella en el grupo. "Tener la libertad, la alegría para jugar al fútbol y disfrutar de lo que hacemos", resumió sobre las primeras consignas del técnico.
Para el delantero el regreso a El Sadar de mañana supondrá reencontrarse con el equipo en el que militó la temporada pasada y desde el que dio el salto al Deportivo. "Me fui con la conciencia muy tranquila de haber hecho todo lo posible. Siempre se puede hacer más, pero muy orgulloso de defender esa camiseta", indicó ayer sobre la vuelta a Pamplona.
