El Deportivo se mantiene con vida tras los dos últimos triunfos consecutivos, ambos lejos de Riazor, que le permitieron sumar seis puntos que, puede que no le sirvan para continuar entre los seis primeros cuando mañana finalice la jornada con el Cádiz-Málaga del Ramón de Carranza, pero sí le permitirán seguir dependiendo de si mismo para lograr una de las plazas de que dan derecho a disputar la promoción. Todo por los resultados cosechados a domicilio; todo a pesar de la negativa trayectoria que mantiene en campo propio.

Llevan los blanquiazules 31 puntos en el feudo coruñés y 29 en sus respectivas salidas a lo largo de la temporada; todavía podría sumar seis más y alcanzar los 35 ya que aún tendrá que visitar al Lugo y al Elche. En Riazor, llevan los deportivistas poco más de la mitad de los 54 puntos que disputó; fuera sus registros son similares. Son números para estar en puestos de ascenso directo, pues solo el Granada supera estos registros con 30 puntos tras su empate de ayer en el Carlos Tartiere de Oviedo.

En campo propio es donde se alcanzan los objetivos y en campo propio es donde falló el Deportivo esta temporada a pesar de haber mostrado una primera vuelta casi impoluta durante la que ganó siete de los diez partidos disputados. El Málaga se había llevado un empate (1-1) en aquel encuentro de la expulsión de Quique por un remate de chilena. Una accidente; pero después también igualaron el Numancia, que iba perdiendo 2-0, y más tarde el Lugo, que acabó con dos futbolistas menos.

Fue la segunda vuelta la que diezmó a los futbolistas dirigidos por Natxo González, y ahora por José Luis Martí, ya que desde que empezó esta segunda parte de la competición solo fueron capaces de superar, y con solvencia, al Albacete. Fue en el primer partido después del paso del ecuador de la competición, pero desde entonces, el pasado 20 de enero, los blanquiazules no volvieron a ganar. Es más, perdieron tres partidos ante Las Palmas, Rayo Majadahonda y Extremadura; y empataron cuatro. Todos equipos de la parte baja de la clasificación.

Veintitrés puntos se escaparon de Riazor, una barbaridad para un equipo con la necesidad de regresar cuanto antes a Primera División. Pero es en casa donde ahora puede aportar la solución, pus por aquí tienen que pasar Cádiz, Mallorca (ambos rivales directos) y el Córdoba. Contra los andaluces cerrarán la fase regular de la Liga y quien sabe si su participación definitiva en esta campaña. Nueve puntos puede sumar el cuadro coruñés ante su parroquia, seis ante dos adversarios que tienen el mismo objetivo y tres ante un conjunto que llegará ya con el billete destino a Segunda B en la mano.

La jornada de ayer posibilitó que los deportivistas aumentasen su ventaja sobre sus perseguidores, Oviedo y Sporting. Los gijoneses perdieron en su visita al Mallorca, mientras que los carbayones solo pudieron empatar con el Granada. Si hoy el Málaga no gana en Cádiz, el cuadro coruñés seguiría en la sexta plaza, pero los gaditanos desharán el empate que existe en estos momentos. Una igualada los dejaría con un punto máds; una victoria, con tres. pendientes de su visita a Riazor.