El Deportivo afronta su penúltima salida al Anxo Carro con la necesidad a la que lo obliga su racha nefasta en Riazor. En una jornada en la que el Málaga ya sumó los tres puntos de su enfrentamiento con el reus y tiene cuatro puntos más, y en la que el Mallorca recibirá este mediodía al Almería y el Cádiz a Osasuna, con la posibilidad de que baleares y andaluces amplíen la ventaja sobre los blanquiazules, pendientes de lo que hagan estos en Lugo en el partido que cerrará esta noche la jornada de Segunda.

Pendiente de Cádiz y Mallorca

Solo vale ganar para seguir con vida y con la ilusión de ocupar una de las cuatro plazas que dan derecho a participar en el promoción de ascenso a Primera División. Una derrota y el posible triunfo de Cádiz y de Mallorca dejaría a los coruñeses a siete puntos de los mallorquines y a cuatros de malaguistas y cadistas. Demasiada diferencia cuando quedaría nueve puntos en juego.

El valor del Deportivo para este partido es la mejoría mostrada frente al Cádiz en la jornada anterior, a pesar del empate, y también sus números a domicilio, sobre todo en esta segunda vuelta, pues desde que comenzó la segunda parte del campeonato solo sucumbió en su desplazamiento a Pamplona.

Cinco victoria, dos empates y una derrota en las ocho salidas realizadas en la segunda mitad de la Liga „incluido el partido de Reus„, números para que el cuadro coruñés no estuviese situación; pero son también números para tener la confianza necesaria para salir vencedor del Anxo Carro ante un rival también necesitado, aunque por otros motivos.

Para intentar un nuevo éxito a domicilio, José Luis Martí podría optar por mantener el once que utilizó en los últimos partidos, con el regreso de Borja Valle de partida en lugar de Nahuel Leiva. Los demás, a puntan a ser los mismos. La prueba de esta mañana será la definitiva.