Hace tiempo que al Deportivo se le escaparon sus opciones de ascenso directo y ahora busca amarrar la posibilidad de disputar un play off muy comprometido por la derrota del domingo contra el Lugo en el Anxo Carro. A dos puntos de distancia del Cádiz, que cierra la zona de promoción, el conjunto de José Luis Martí no depende de sí mismo y necesita una racha de resultados que se le ha resistido durante todo el campeonato.

El equipo blanquiazul debe lograr un pleno en las tres jornadas que restan para el final de la competición, pero a lo largo del año ha sido incapaz de enlazar tres triunfos seguidos.

Esa incapacidad de encadenar resultados positivos explica en parte la situación límite en la que se encuentra actualmente el Deportivo, pendiente de que una carambola le permita disputar el play off y pelear por una plaza en Primera División.

Lo inmediato para los blanquiazules será ganar el lunes al Mallorca en Riazor para mantener vivas sus posibilidades y aspirar a conseguir una racha inédita en lo que va de curso y que ha tenido a tiro hasta en tres oportunidades. La última fue hace poco más de una semana, cuando el Cádiz visitó Riazor también con el play off en juego.

El Deportivo venía entonces de ganar en Soria y Zaragoza, pero no pasó del empate contra los andaluces a pesar de conseguir adelantarse en el marcador. Aquel resultado frustró las aspiraciones deportivistas de afianzarse en la zona de promoción e incluso terminó comprometiendo su presencia.

El empate enterró la tercera intentona del equipo de enlazar tres victorias consecutivas esta temporada. La primera fue casi al comienzo del campeonato, después de que conjunto blanquiazul se impusiera al Granada y al Nàstic en las jornadas 6 y 7, respectivamente. En la 8 recibía al Málaga en Riazor, que rescató un empate que impidió el trío de triunfos.

La segunda ocasión en la que pudo enlazar esas tres victorias consecutivas fue después de ganar a Albacete y Sporting. Tampoco lo consiguió después de tropezar contra el Tenerife en Riazor. Aquel decepcionante empate contra los canarios inauguró una racha nefasta de los deportivistas como locales. Desde ese encuentro disputado a finales del mes de enero no han vuelto a ganar en su estadio y ya van ocho partidos.

Ahora lo necesitan ante el Mallorca, aunque también mirarán de reojo a lo que ocurra entre Cádiz y Granada.