El deportivista Íñigo López, en libertad bajo fianza de 75.000 euros tras su detención el martes en el marco de la Operación Oikos sobre el amaño de partidos, tiene previsto reincorporarse esta mañana (09.00 horas) a los entrenamientos en Abegondo. Una vez finalizada la sesión, el futbolista se dirigirá al juzgado de guardia acompañado de su abogado, Juan Pablo Lerena, para cumplir con la obligación que le impuso el titular del Juzgado de Instrucción 5 de Huesca, Ángel Manuel De Pedro Tomás, de personarse los días 1 y 15 de cada mes en dependencias judiciales o bien en comisaría. Está acusado de pertenencia a organización criminal como parte de una red que predeterminaba resultados de partidos para lucrarse en las apuestas, de corrupción entre particulares en su variante de competiciones deportivas, y de colaboración en estafa.

Íñigo quiere "volver cuanto antes a la normalidad", según explica su abogado, que ayer viajó con él en coche desde Logroño hasta A Coruña. En su casa de la capital riojana durmió el jueves el central una vez puesto en libertad bajo fianza, después de que el martes pasara la noche en los calabozos de A Coruña y, tras unas horas encerrado en Madrid, durmiera el miércoles también entre rejas en Zaragoza, desde donde fue trasladado a Huesca.

El nuevo presidente del Deportivo, Paco Zas, habló el miércoles y ayer con el jugador, que también pudo charlar telefónicamente con el director deportivo, Carmelo del Pozo, con el técnico, José Luis Martí, y con varios compañeros, según relata Juan Pablo Lerena: "Con el Deportivo la relación es perfecta. Le han dicho que el club es la casa de Íñigo, que están a su disposición y que hiciera vida normal. Básicamente, lo que él quisiera. E Íñigo dice que cuanto antes vuelva a la normalidad, mejor".

Por eso estará de nuevo desde esta mañana a las órdenes de Martí, aunque no viajará con sus compañeros a Alicante, donde el equipo se concentrará antes del encuentro de mañana en Elche. "Entrenar le va a venir muy bien, aunque sea para estirarse. Lleva tres días encerrado o en coche", argumenta Lerena, que defiende que Íñigo no tiene nada que ver con ninguna trama de apuestas y amaño de partidos. "Hay que tener paciencia, mesura y respeto por la presunción de inocencia. Son principios muy básicos", recuerda el letrado. Cuenta con que pronto se levante el secreto sumarial, pero intuye que el proceso tardará "años" en cerrarse con una sentencia firme: "Esto va para años, salvo que pronto quede acreditado que no hay absolutamente nada y el juez lo archive".

Bravo y Aranda salen de prisión

También en el marco de la Operación Oikos ayer salieron de la prisión de Zuera (Zaragoza) los exjugadores Raúl Bravo y Carlos Aranda, bajo fianza de 100.000 euros impuesta para cada uno de ellos por el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Huesca, en relación a esta investigación de posibles amaños de partidos de fútbol. Ambos exfutbolistas están siendo investigados como posibles responsables de los delitos de pertenencia a grupo criminal, corrupción en el deporte y estafa, y el juez les impone la obligación de comunicar cualquier posible cambio de domicilio. El exdeportivista Borja Fernández, otro de los detenidos el martes, está desde el jueves en libertad con cargos, bajo fianza de 50.000 euros.