José Luis Martí agradece de antemano el apoyo de la afición del Deportivoafición Deportivo, volcada con el equipo para el partido de mañana en A Coruña contra el Mallorca. "Es una satisfacción no solo para los jugadores sino para toda la ciudad. Estamos todos ilusionados, pero debemos tener cautela. Esto va a ser muy complicado, que nadie se equivoque. Queremos devolvérselo de la mejor manera, consiguiendo el objetivo", afirmó esta mañana el técnico del Deportivo en Abegondo.

En el Mallorca el balear inició y cerró su carrera como futbolista, pero cree que "no hay que darle más importancia" a esa circunstancia. "Es el futbol. Voy a vivirlo con la máxima pasión y defender los intereses del Deportivo. No puedo obviar que es el equipo en el que me formé, es mi isla. Las circunstancias son las que son pero no hay que darle más importancia. No es el partido de Martí. es el partido del Deportivo y del Mallorca", añadió el técnico, que quiere "vivir el sueño del Deportivo y el mío propio de estar en Primera el año que viene".

"Quiero que la gente esté ilusionada pero mis jugadores son conscientes de lo que han vivido y sufrido. El Mallorca acabó por delante y tiene esa pequeña ventaja. Mis jugadores son muy conscientes de que el rival quedó por delante y no va a ser nada fácil", recalcó el técnico, que citó a toda la plantilla para un último entrenamiento mañana en Riazor.

A su juicio "es probable" que la afición del Dépor pueda pensar que el Málaga era un rival más complicado que el Mallorca, "pero los jugadores no lo piensan así, ni el entrenador, ni el club". "Esos 35.000 no pueden parar de cantar y animar. Hay que ser muy cautelosos y saber que no hay nada ganado. Empieza la eliminatoria y vamos por detrás en el marcador", añadió Martí, totalmente al margen de que apareciera su nombre en la Operación Oikos por negarse a pactar un empate cuando era entrenador del TenerifeMartíOperación Oikos. "La gente que me conoce sabe lo que pienso y cómo soy", zanjó el entrenador, centrado única y exclusivamente en el partido de mañana contra el Mallorca: "Es una equivocación desviar la atención a otros momentos".