Deportivo y Huesca llegan al partido de mañana en El Alcoraz con el paso cambiado, con un conjunto local poderoso, pese a su juventud y un cuadro blanquiazul con una hoja de servicios en la que destacan los títulos alcanzados en una época pretérita. Pero el historial no juega; tampoco los trofeos que reposan en las vitrinas del club blanquiazul, lo hacen los futbolistas bajo las premisas de cada entrenador. Y los del conjunto aragonés parecen ahora más fuertes y con mayores argumentos que los coruñeses. Vienen de Primera, un hecho que convierte a los azulgranas en favoritos, aunque sea el Deportivo el adversario al que se enfrente.

Contenderán el "equipo más grande de Segunda" y otro cuya "proyección es infinita", en opinión de Juan Antonio Anquela, técnico del conjunto blanquiazul. El jienense alabó la historia del club coruñés, pero quiere tener los pies sobre el suelo y centrarse en la realidad. "Viene de ser la repera", comentó sobre la entidad deportivista, "pero ahora la música la ponen otros y hay que saber bailarla". Lo que viene a ser que hay que reconocer que en la actualidad el ritmo lo marcan otros, entre ellos el Huesca "un ejemplo a mirar", junto al "Numancia" que están "siempre saneados", explicó el entrenador.

Recuerda esta intervención de Anquela a aquella de Javier Irureta, en su última época como máximo responsable del banquillo deportivista, cuando la reedición de las grandes gestas ya no era posible. "A veces estamos comiendo demasiado jamón, todos los días", había comentado el técnico irundarra, en clara referencia que el potencial del Deportivo ya no era el de antaño, no volvería a serlo. Irureta cerró su ciclo como deportivista en junio de 2005. Desde entonces sucedieron bastantes cosas buenas, pero también negativas. El equipo regresó a Europa, pero con escasas aspiraciones, y en la Liga cada vez estaba más lejos de la cabeza; hasta que descendió.

Tres descensos a Segunda desde 2011, las dos primeras veces el cuadro coruñés logró regresar a la elite a la primera, pero el año pasado fracasó. Y ahora le corresponde ceder el teórico papel protagonista a otros equipos como el caso del Huesca. Tiene más potencial financiero, lo que le concede una teórica ventaja, pero en A Coruña ya se sabe que la teoría y la práctica a veces siguen caminos paralelos. "Estamos en Segunda y para ganar hay que hacer las cosas muy bien y mucho tiempo. El otro día „contra el Oviedo„ bajamos en una fase del partido y no perdimos de milagro", explicó el entrenador como queriendo dejar muy claro que esta competición es muy complicada. "Aquí no se regala absolutamente nada y el nivel de los equipos es muy parejo", reiteró, en un discurso que es muy similar en la mayoría de los entrenadores de la categoría. Con todo, el equipo deportivista viaja a Huesca con la intención de demostrar que la historia tiene todavía peso.