Fernando Vidal se hizo ayer con el control del Deportivo después de la renuncia del consejo de administración encabezado por Paco Zas, que decidió hacerse a un lado antes de la celebración de la junta extraordinaria de accionistas del próximo 14 de enero en el que Vidal será investido presidente de manera oficial salvo que aparezca otro candidato. Lo que habrá hasta entonces será una directiva de transición sin él y formada por el grueso de la candidatura del que fuera responsable de la parcela deportiva entre enero de 2014 y octubre de 2017 durante la etapa de Tino Fernández.

El gobierno del club recaerá de facto en Fernando Vidal y su equipo hasta las elecciones, lo que les deja vía libre para trabajar en el mercado de fichajes de invierno que está a punto de inaugurarse.

El relevo en la directiva deportivista es fruto del acuerdo alcanzado ayer entre el consejo saliente encabezado por Paco Zas y el equipo del que salvo sorpresa será el próximo presidente después de que en las oficinas de la plaza de Pontevedra se constatase que no iba a surgir ninguna otra alternativa para dirigir el club.

La directiva saliente planteó la medida como una forma de que la candidatura de Fernando Vidal pudiera tomar medidas sin tener que asumir Zas y sus consejeros responsabilidades por decisiones ajenas.

En el fondo estaban la firma del acuerdo con Abanca que anunció Vidal en la asamblea de la semana pasada y los movimientos en el mercado de invierno para reforzar el equipo y así lo admitió el consejo saliente en un comunicado en la web del club a primera hora de la tarde. "Con esta decisión, los miembros del Consejo de Administración saliente pretenden facilitar que los nuevos consejeros puedan iniciar inmediatamente su trabajo y operar en el mercado de enero", sostuvo el club antes de que el equipo de Vidal asumiera el control de la entidad blanquiazul.

A la candidatura del exconsejero, sin embargo, no le seducía de entrada la solución planteada por Paco Zas para que tuvieran vía libre para trabajar antes de las elecciones de las que saldrá la nueva directiva. El equipo de Fernando Vidal entendía que ese paso se debía haber producido en la junta de accionistas de la semana pasada en la que se aprobaron las cuentas y el presupuesto.

Paco Zas se manifestó contrario a esa posibilidad y defendió que debían ajustarse a los plazos legalmente establecidos, aunque se mostró abierto a colaborar con la candidatura de Vidal en la toma de decisiones hasta la celebración de la junta de enero.

El entendimiento, sin embargo, no se produjo y acabó derivando en el relevo de ayer. El ya expresidente no quería tomar decisiones que comprometiesen al club y que no partían de sí mismo, sino de la candidatura de Vidal, sin saber a ciencia cierta si podría surgir otra alternativa a la presidencia en próximos días.

Con el traspaso de poderes ya materializado, el nuevo consejo de administración de Juan Antonio Armenteros le afeó esa actitud a la directiva saliente mediante un comunicado y la acusó de "pasividad". "Queremos hacer constar que nos hemos visto obligados a dar este paso, considerando que desde el pasado día 17 de diciembre hasta el día de hoy el anterior Consejo de Administración mantuvo una actitud de pasividad ante la toma de decisiones claves y urgentes para asegurar la supervivencia económica y deportiva del Club", indicaron los nuevos responsables de la entidad.

El nuevo consejo aseguró que entre esas "decisiones claves" se encuentra el acuerdo con Abanca. "Es vital la firma del préstamo participativo que permitirá inyectar liquidez en el Club para adoptar decisiones deportivas y económicas urgentes", sostuvo la directiva pocas horas después de tomar posesión.