El guante en la zurda de Ager Aketxe está encajando a la perfección desde la banda derecha en el nuevo diseño con defensa de cinco confeccionado por Fernando Vázquez para resucitar al Dépor. Jugó mucho con Anquela y también luego con Luis César, pero a las órdenes del técnico de Castrofeito el vasco está destapando su versión más coral para ganar protagonismo los 90 minutos, no solo a balón parado. Sentado al sol en el banquillo de Riazor, Aketxe hace un breve paréntesis en la entrevista cuando Vázquez, camino de los vestuarios, bromea con él: "Te voy a leer, ¿eh?", le advierte sonriente. "Pero si te estoy poniendo por las nubes", responde Aketxe también en tono muy distendido. Un ejemplo de la complicidad y la buena sintonía entre el entrenador y sus jugadores, que le agradecen que haya sido capaz de devolverles la confianza perdida tras una primera vuelta desastrosa.

¿Cómo se explica un cambio tan radical en el equipo?

Creo que el último partido antes del parón nos sirvió a todos para quitarnos un peso de encima con esa victoria en el último minuto [contra el Tenerife]. Luego, con la llegada del míster nos ha hecho cambiar a todos un poco la mentalidad, volver a creernos que podemos ganar y que el nivel que estábamos dando no era el nuestro. Es un poco eso. Y luego él ha cambiado un par de matices y creo que el equipo ahora es mucho más sólido y está siempre mucho más cerca de la victoria que de la derrota.

Contra el Cádiz volvió a marcar uno de los fichajes invernales, Sabin Merino, pero los demás ya estaban cuando empezó la temporada.

En realidad somos los mismos. Creo que pasamos todos un bache mental que nos hizo a todos no mostrar nuestra mejor versión. Nos costó muchísimo. Necesitábamos esa victoria y a partir de ahí nos despejamos un poco y ahora estamos todos mejor.

¿Vázquez les ha convencido de que son mucho mejores de lo que aparentaban?

Nos ha hecho confiar en nosotros mismos y luego nos ha dado matices al juego para estar mejor. El club está reforzando bien el equipo, las incorporaciones que han llegado son de nivel y han venido en forma, y eso también nos ha ayudado.

¿Tiene ganas de que se acabe el mes para saber de una vez cuál es la plantilla definitiva?

Que estén siempre sonando nombres, que si van o si vienen... Yo personalmente sí tengo ganas ya de saber cómo va aquedar confeccionado el equipo y concentrarnos lo máximo posible todos en poder sacar esto adelante.

Hace un mes, cuando el Dépor era colista y todo parecía perdido, ¿llegó a plantearse una salida en busca de otro reto?

No. Yo hice una apuesta por venir al Deportivo. Sí que es verdad que las cosas no se dieron como todos habíamos esperado, pero yo en ningún momento me planteé salir de aquí. Todo lo contrario. De hecho, quiero quedarme aquí para sacar esto adelante y poder llevar al Dépor donde se merece.

¿Le reconforta haber jugado casi todo con tres entrenadores diferentes?

Sí. Por ese lado sí que estoy contento, porque al final vino Anquela y confió en mí, vino Luis César y también tuve mi momento y con Fernando de momento no me puedo quejar, así que por esa parte estoy contento. Ahora, a seguir intentando dar el nivel que estoy dando, que creo que ahora estoy en un buen momento, y seguir aportando al equipo.

¿El nuevo sistema le exige más físicamente?

Ahora quizá estoy jugando un poquito más escorado a la banda. Yo creo que en mi caso los esfuerzos son más repetidos y de más intensidad que igual cuando jugaba más de mediapunta, porque igual corría más pero a no tan alta intensidad.

El día del Racing, por ejemplo, hizo un esfuerzo descomunal para ayudar a conservar el 2-1 con un jugador menos.

Claro. También encima ves que estás ganando y cuando se gana siempre es más fácil correr. En ese momento al final nos quedamos con uno menos y sabíamos que había que sacar la victoria como fuera. Todos sacamos todo lo que teníamos dentro, todo el equipo, y la verdad es que estamos contentos.

Aún no hay nada hecho porque vienen de cuatro victorias seguidas, pero continúan en descenso.

Está claro. Si seguimos en descenso es porque hicimos muchas cosas mal. Ahora nos tenemos que quedar con la racha que llevamos, con esta dinámica, aprovechar este momento y seguir por este camino, que yo creo que es el adecuado y es lo que teníamos que hacer.

El Albacete parecía estar en otra liga, pero si le ganan mañana lo meten en el lío.

En realidad tenemos que pensar en nosotros mismos. Sí que tenemos que mirar un poco los resultados directos que tenemos con estos equipos. El Albacete empezó muy bien, consiguió en muchos partidos la victoria por la mínima y eso le dio un buen margen. Ahora no están encontrando ese juego para conseguir los triunfos y nosotros tenemos que ir a por todas allí y seguir en esta dinámica. Si logramos esa victoria, quizá seguramente saldremos de la zona de descenso.

¿Está disfrutando por primera vez en la temporada?

Sí. Cuando llegué me sentí bien y me encontraba en forma, pero sí que es verdad que no logramos esos triunfos. Ahora, con el nivel del equipo y con las victorias, todo se disfruta mucho más.

Marcó cuatro goles en las primeras seis jornadas, el último al Numancia en septiembre. ¿Aspira todavía a superar su récord en Segunda, los ocho tantos que firmó con el Bilbao Athletic en la temporada 2015-16?

Hombre, me gustaría. Tampoco es algo en lo que tenga una fijación extrema, pero a todos nos gusta superarnos.

En las últimas jornadas está participando mucho más tanto en ataque como en defensa, ¿qué le diría a esos aficionados que le achacan que solo es un especialista para el balón parado y que en lo demás no aporta?

No sé, yo tampoco soy quién para meterme en eso. Yo sé que soy mucho más que un lanzador de faltas y sé que si no las tirara, seguiría jugando a este mismo nivel, así que la verdad es que eso a mí no me preocupa.