Llega el Deportivo al derbi gallego de Segunda después de ver frenada su racha positiva de ocho jornadas tras su derrota del pasado domingo en La Romareda, pero con la intención de mantener en Riazor la que inició el pasado 21 de diciembre cuando se impuso al Tenerife. Desde entonces fueron cuatro triunfos consecutivos, más otros tres a domicilio, solo interrumpidos por el empate contra el Girona (2-2) en el último encuentro disputado en feudo coruñés hasta la fecha. Un racha intimidatoria.

Y en racha también llegará el Lugo, que lleva siete puntos de los nueve últimos en juego con un empate y dos triunfos, ambos de forma consecutiva en Fuenlabrada (0-1) y Oviedo en el Anxo Carro (1-0). Una senda positiva que tiene un nombre por encima de los demás, El Hacen, autor de los dos goles en los dos últimos encuentros y que supusieron que el equipo que entrena Curro Torres sumase seis puntos. El futbolista mauritano, cedido por el Valladolid, sigue la estela que marcó Sabin Merino desde su estreno con la casaca blanquiazul: a gol por cada jornada. La del vasco duró cuatro, hasta que se lesionó.

Anotó el deportivista en su primer partido contra el Racing de Santander, en un partido en el que Çolak hizo el segundo y le costó la expulsión al ver la segunda amarilla; repitió con motivo de la visita del Cádiz y también estuvo acertado en el remate en la visita al Albacete „con rebote incluido„ y en el encuentro contra Las Palmas en Riazor. Cuatro partidos, cuatro goles. El Hacen lleva dos encuentros con el Lugo y en ambos firmó el gol del triunfo. Un simple tanto en cada jornada que le sirvió al cuadro lucense para sumar de a tres, como hacía casi el Deportivo de Fernando Vázquez. Hasta en eso igualan.

Un empate y dos triunfos

Antes de esas dos victorias consecutivas, el conjunto rojiblanco desperdició la oportunidad de sumar los tres puntos frente al Elche, con el que empató (2-2) en el Anxo Carro y dilapidó una ventaja de dos goles, sendos tantos del veterano Nino entre los minutos 86 y 88 dejaron a los gallegos sin dos puntos. Después llegaron los seis consecutivos tras las victorias en Fuenlabrada y ante el Oviedo. Sendos cabezazos del joven mauritano (tiene 22 años) le dieron el triunfo a los lucenses y lo dejan a las puertas de los puestos de salvación.

Y así llega el Lugo a Riazor, de donde se llevó un punto en sus dos últimas visitas como consecuencia de sendos empates sin goles. La última fue en la pasada temporada; la anterior, en el curso 2013-14 con Fernando Vázquez en el banquillo deportivista. En Liga, queda otro partido entre ambos conjuntos en el coliseo coruñés, que se saldó con triunfo blanquiazul, pero hay que remontarse a la temporada 1974-75. Fue en ese curso cuando ambos conjuntos se enfrentaron por primera vez en partido oficial, con los dos en Tercera División, y el triunfo se decantó del lado local con goles de Guillermo Muñoz y de Alfonso Castro, mientras que el de los visitantes llevó la firma de Hidalgo, un tanto que en su momento era el del empate a uno. Hasta que el pichichi de la categoría de esa temporada sentenció.

Es ahora el momento de que el Deportivo se anote el segundo triunfo ante los lucenses, para mantener esa racha de invicto en casa y sumar su quinto partido seguido sin perder, pero además para imponerse a un adversario que está a solo dos puntos y que marca el descenso. Una victoria dejaría a los blanquiazules con cinco puntos de ventaja a los que habría que sumar el golaveraje particular. Estarán en juego mucho más que tres puntos, además del orgullo de sus respectivas aficiones, ya que al final el peso de los dos enfrentamientos en la competición va a decidir en qué puesto acaba uno y otro en el más que posible empate a puntos.