El Deportivo Liceo solicitó ayer la aplicación de un ERTE para los trabajadores del club, incluidos los jugadores de la primera plantilla, que compite en la OK Liga, por un periodo de cuatro meses. Una decisión, que supone "un ejercicio de responsabilidad", asegura Jesús Sánchez Veiga, abogado y directivo del club. La junta directiva de la entidad verdiblanca, que preside Daniel Echevarría, adoptó esta resolución a causa de la cancelación de las competiciones como consecuencia de la epidemia de coronavirus que afecta al país y que ha obligado a interrumpir las competiciones deportivas.

"Es un ejercicio de responsabilidad con los jugadores, con los patrocinadores, los socios, las instituciones y, por supuesto, con el propio club", añade el dirigente liceísta. "No podemos tener a la gente en casa y seguir gastando", abunda.

La solicitud cursada ayer por el Liceo marca un plazo de "cuatro meses". "La norma exige que se señale un tiempo determinado previsible", hasta un máximo de 180 días, " y nosotros hemos querido ser precavidos, y después de darle vueltas durante una semana hemos pensado en solicitarlo por ese periodo (cuatro meses)", explica Sánchez Veiga.

No obstante, reconoce que estarán vigilantes y que en el momento en que se recobre la normalidad volverán al trabajo. "Entendemos por normalidad tener la posibilidad de entrenarse; tan pronto llegue ese momento los jugadores volverán a ejercitarse" y serán dados de alta de nuevo en la Seguridad Social.

Sánchez Veiga estudió al detalle las posibilidades para cubrir las previsiones y dar tranquilidad a los jugadores/trabajadores. "Es una situación excepcional y el deporte tiene, además, sus peculiaridades. No se le puede mandar a un jugador a casa y al sofá; tiene que reincorporarse lo mejor posible", y eso tiene un coste.