Apenas duró dos meses Juan Carlos Rodríguez Cebrián como asesor de Fernando Vidal, el empresario coruñés cesó en su cometido el pasado 13 de marzo por razones profesionales, dicen fuentes consultadas por este diario, aunque también se argumentan otras causas para justificar su desaparición de la primera línea de trabajo en el club. Entre ellas, que existían diferencias entre el propio Cebrián y parte de los miembros del consejo de administración; también se apunta a unas declaraciones en COPE, que no fueron bien recibidas por algunos de los más importantes patrocinadores de la entidad; así como a su presencia absoluta en todas las decisiones trascendentes del club.

Cebrián fue el principal sustento de Vidal cuando el exdirectivo decidió dar el paso para sustituir al equipo presidido por Paco Zas. Su participación en todo tipo de negociaciones, incluido el préstamo de Abanca, fue determinante. En todas tuvo especial protagonismo, tanto que incluso parecía que sería él el cabeza de la candidatura. Pero finalmente decidió quedarse a la sombra y mantenerse como el mentor del presidente; un rol que le permitía negociar y ejecutar, aunque desde un teórico segundo plano. "No me dejaron ser presidente, ni consejero ni nada", había declarado en la emisora coruñesa sobre la postura de su familia en cuanto a su posible integración en el consejo de administración.

Fue Cebrián el encargado de transmitirle a los empleados del club las nuevas pautas de funcionamiento; también se dirigió a los futbolistas y técnicos „era habitual en Abegondo y en los desplazamientos del equipo„, aunque en las dos últimas semanas su presencia se había reducido casi hasta su ausencia, y también consumía numerosas horas en la sede de la plaza de Pontevedra. Fue él quien decidió estimular a los futbolistas con una prima por cada triunfo. Un premio por partido y sin vincular a un objetivo, en este caso la permanencia. Como los jugadores cumplieron alcanzando seis victorias consecutivas „la primera de las siete llegó antes de que Fernando Vidal fuese proclamado presidente„, el premio ascendió, según fuentes conocedoras, a un montante de unos 300.000 euros.

Otro mimo más que recibieron los futbolistas fue realizar en vuelo chárter el desplazamiento a Almería (4-0), partido jugado el pasado 7 de marzo y que fue el último disputado hasta la fecha. Un tipo de desplazamiento inusual entre los clubes de Segunda División, sobre todo si se tiene en cuenta que hay deudas pendientes. Una imagen de rico, que se está volviendo en contra del propio consejo, de ahí las diferencias con algunos directivos, ya que hay quien pregunta cómo se puede reclamar una renuncia en la ficha en los futbolistas si existe dinero para ofrecer primas y para viajar en chárter. Argumento utilizado también por parte de los empleados del club cuando se barajó la posibilidad de realizar un ERTE, medida ya descartada por el presidente. Pendiente de que se reanude la competición, que es lo que parece que sucederá, Vidal mantiene todo tipo de reuniones con los futbolistas y técnicos para intentar llegar a un acuerdo en el aspecto económico, que pasaría por una buena predisposición de los profesionales, según apuntan públicamente, y ya con otro nuevo sustento, Miguel Otero.